CHAMPIONS LEAGUE | MILAN 3 -1 BRUJAS Reijnders brilla, Morata respira

El Milan tumbó 3-1 al Brujas y logró sus primeros puntos en la Champions. El español jugó hasta el 75′, cuando le sustituyó Camarda que hizo historia como debutante y tuvo muy cerca hacerla también como goleador.

Mirko Calemme
As
El Milan llegará a la cita del Bernabéu con sus primeros tres puntos en la Champions en el bolsillo. Los milaneses, tras dos derrotas en las primeras dos jornadas, tumbaron 3-1 al Brujas en un partido bastante más complicado de lo esperado, con Álvaro Morata en el campo durante los primeros 75 minutos.

La noche empezó con muy malas sensaciones para el club italiano. En menos de 10 minutos, los belgas asustaron tres veces a San Siro. La primera con Tzolis, que se topó con una intervención de Maignan tras un error de Fofana aprovechado por Vanaken. La segunda, otra vez con el griego, que recibió de Jutglá y, con un derechazo, volvió a darle trabajo al guardameta rival. La tercera fue la más peligrosa: tras un córner, de Cuyper disparó golpeando a los rivales y Ordóñez intentó un latigazo desde lejos que golpeó el larguero, con Maignan que, esta vez, no hubiese podido hacer nada.

El gran susto despertó a los rossoneri tras un comienzo frágil. Leao, que sigue brillando solo por momentos, en una de sus llegadas imparables construyó la primera ocasión de los locales, penetrando en el área y buscando a Pulisic, que golpeó a Mignolet. El estadounidense se confirmó como el hombre más peligroso de los milaneses poco después, en el 34′, abriendo la lata con un gran gol olímpico, su séptimo tanto de este curso. El buen momento de los milaneses continuó en el 40′ cuando, gracias al videoarbitraje, una falta que el árbitro Zwayer pitó inexplicablemente contra Reijnders se convirtió en una roja directa a Onyedika por una dura entrada sobre el mediocampista. Bendito VAR. Todo parecía haberse puesto cuesta abajo, pero el Milan volvió a complicarse la vida. En el minuto 51, el recién entrado Sabbe puso las tablas finalizando una jugada armada por Tzolis, que recibió el balón de otro revulsivo, Vetlesen.

Esta vez el Milan reaccionó enseguida, y tuvo mucho mérito Fonseca. En el 60′, el portugués volvió a tener la valentía de renunciar a Leao y a sus altibajos, apostando por un Okafor que, dos minutos después, penetró desde la izquierda, llegó hasta el fondo y le entregó a Reijnders el esférico del 2-1.El holandés se convirtió en el goleador de la noche en el 72′, materializando otra jugada parecida, esta vez con asistencia de Chukwueze, chutando con precisión tras un centro del extremo.

Después del 3-1, el Meazza vivió un momento histórico. Y pudieron ser dos. Francesco Camarda, con 16 años y 226 días, sustituyó a un Morata que hoy se dedicó sobre todo al trabajo de equipo que tanto le gusta a Fonseca, y se convirtió en el debutante en la Champions más joven del club y del fútbol italiano. Los tifosi le ovacionaron una vez saltado al campo, y explotaron en el 87′ cuando, con un cabezazo imperial, el punta anotó el 4-1 que le habría valido el récord de goleador más joven en la historia de la Copa de Europa. El VAR, no obstante, le quitó por fuera de juego esa enorme alegría , que le dejó como herencia solo una tarjeta amarilla por haberse quitado la camiseta en la celebración. No tiene (todavía) el gol soñado, pero Camarda confirmó su aire de predestinado. Y el Milan, antes de visitar al Madrid, respira con los primeros tres puntos europeos de esta temporada.

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