Tres civiles israelíes fueron asesinados por un terrorista palestino en un ataque en la frontera entre Cisjordania y Jordania
Las víctimas fueron baleadas en un puesto de control en el paso fronterizo de Allenby. El agresor fue abatido por las fuerzas de seguridad
“Un terrorista se acercó a la zona del puente Allenby (al norte del Mar Muerto) desde Jordania en un camión. Se bajó del camión y abrió fuego contra las fuerzas de seguridad israelíes que operaban en el puente”, indicó el Ejército israelí en un comunicado.
El servicio de emergencias israelí Magen David Adom (MDA) recibió una llamada por el ataque a las 09:55 hora local (06:55 GMT) y sus paramédicos acudieron al lugar.
Los socorristas, con ayuda de médicos militares, “han declarado la muerte de tres hombres, de aproximadamente 50 años, por heridas de bala”, indicó MDA en un comunicado.
El Ejército precisó que los tres muertos son “civiles israelíes”.
“Este es un incidente muy grave. Encontramos a tres hombres inconscientes, sin pulso y sin respirar, con heridas de bala. Junto con el equipo médico del Ejército, realizamos esfuerzos de reanimación, pero desafortunadamente tuvimos que declarar su muerte en el lugar”, dijo Yotam Tzur, técnico de emergencias médicas de MDA.
Varias tropas militares fueron desplegadas al lugar de los hechos para “descartar la sospecha de que el camión estuviera cargado de explosivos”, aseguró el Ejército.
En tanto, el cruce terrestre de Allenby, utilizado diariamente por miles de palestinos (que no tienen derecho de usar el aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv) fue cerrado, indicó a EFE el Ejército israelí.
De su lado, las autoridades jordanas confirmaron el cierre y anunciaron una investigación sobre el caso.
Los Comités de Resistencia Popular, que aglutinan a milicias palestinas, elogiaron lo que consideraron la “heroica” operación en venganza por “las horribles masacres y el genocidio” de Israel contra el pueblo palestino.
De su lado, el Frente Popular para la Liberación Palestina dijo que el atacante era un joven jordano que “representa la conciencia de toda la juventud árabe”, y llamó a los palestinos a “seguir el ejemplo y a participar (...) en la resistencia”.
Cisjordania ocupada vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05).
En agosto, cuatro israelíes -tres civiles y un guardia de seguridad- murieron por ataques de palestinos.
Y el 1 de septiembre, tres policías israelíes murieron en un ataque a tiros perpetrado por palestinos contra un coche policial, en un puesto militar en el área de Hebrón, en el sur de Cisjordania.
Por su parte, el Ejército israelí ha incrementado sus violentas redadas en la zona y los ataques de colonos israelíes contra palestinos se han hecho más frecuentes y sangrientos.
En días pasados, las fuerzas israelíes realizaron una operación a gran escala en el norte de Cisjordania ocupada. Con tanques, buldóceres y helicópteros blindados, e incluso francotiradores y drones explosivos, el Ejército israelí mató a 36 palestinos durante la incursión de 10 días, entre ellos menores y ancianos.
En lo que va de 2024, al menos 334 palestinos han muerto por fuego israelí, la mayoría milicianos o atacantes pero también civiles, incluidos medio centenar de menores, según el recuento de EFE.
Del lado israelí, han muerto este año 28 personas: 14 uniformados y 14 civiles, seis de ellos colonos.