“Todos los días son 7 de octubre”: el conmovedor video sobre el ataque de Hamás contra Israel a un año de la masacre
La pieza audiovisual refuerza el pedido de liberación de quienes aún están secuestrados y pide que se mantenga vivo el recuerdo de los asesinados
“Todos los días son 7 de octubre”, es la frase que se destaca al comienzo y al final del video, el cual habla de la detención simbólica del tiempo y cuya intención es que la sociedad no se olvide del acontecimiento que significó la peor masacre contra judíos desde el Holocausto. Incluso luego de concretar el hecho, los terroristas capturaron cadáveres de víctimas que ofrecieron a su pueblo como trofeos, desmembrándolos para compartir sus partes en una fiesta de sangre.
En este sentido, a lo largo de la grabación, una voz en off relata: “Desde la masacre llevada a cabo por la organización terrorista Hamás en el 2023, todos los días son 7 de octubre. Una tarde de mate es 7 de octubre. Una mañana de lluvia es 7 de octubre. El asado del domingo es 7 de octubre. El superclásico es 7 de octubre. El primer día de escuela es 7 de octubre”.
Y concluye: “El 7 de octubre, los terroristas de Hamás secuestraron y mutilaron, violaron y asesinaron. Frente a tanto horror, el tiempo se detiene. Esperamos por los secuestrados. Recordamos a los asesinados porque después de la masacre terrorista que realizó Hamás. 7 de octubre es todos los días”.
Cómo comenzó el atentado terrorista contra Israel del 7 de octubre
A las 6.29 am del 7 de octubre de 2023, alrededor de 3.500 miembros del grupo terrorista Hamas lograron atravesar el límite que divide la Franja de Gaza de Israel y asesinar, violar, incinerar y secuestrar a miles de israelíes. La invasión relámpago se produjo minutos después de la salida del sol y fue por tierra, aire y mar y cuando en los kibutz la mayoría de las familias aún dormía. Solo estaba despierto un enorme grupo de jóvenes que participaban del festival de música electrónica Supernova, en Reim, a pocos kilómetros de territorio palestino.
En ese único lugar fueron masacrados 364 israelíes que habían ido a bailar con amigos y cuyos cuerpos fueron recuperados a lo largo de la imborrable jornada. De otros nada se supo: fueron secuestrados y llevados cautivos a Gaza.
El armamento encontrado durante los operativos de rescate y respuesta al accionar terrorista confirmó lo que la inteligencia internacional conoce desde hace años: lanzagranadas, fusiles de asalto, chalecos, RPG y las municiones, fueron provistas a Hamas por Irán, su principal sponsor.
Al día siguiente, el 8 de octubre, Hezbollah -desde el sur del Líbano- disparó cientos de cohetes, neutralizados por tecnología israelí. Los extremistas chiítas, también brazo armado iraní, ingresaban en la guerra iniciada el día anterior.
La respuesta israelí no esperó y fue contundente: decidió acabar con Hamas como organización terrorista para que dejara de ser una amenaza a su seguridad. De acuerdo a diversas fuentes basadas en Medio Oriente, actualmente el grupo sunita está desarticulado y con más de la mitad del total de sus militantes abatidos. Se calcula que 18 mil de sus miembros murieron en enfrentamientos con el ejército israelí o perecieron producto de bombardeos selectivos.