Luis Arce defendió su gestión ante amenazas de Evo Morales de bloquear carreteras para “hacer respetar” su candidatura
“Ante los que apuestan por el odio, nuestra respuesta siempre será más trabajo en favor del pueblo boliviano”, declaró el mandatario en respuesta a un encuentro de sectores afines al líder del MAS
“Porque pensar en Bolivia no es bloquearla; pensar en Bolivia es industrializarla”, agregó.
También resaltó algunas medidas asumidas recientemente por su Gobierno ante los problemas económicos como la falta de dólares y combustibles o el encarecimiento de algunos productos básicos, que han generado la protesta de sectores como los transportistas y comerciantes.
Entre estas acciones mencionó la eliminación de aranceles para la importación de insumos para la industria farmacéutica y “el arancel cero para la importación de agroquímicos y maquinaria para el sector agroindustrial”.
Arce reaccionó de esta forma tras las amenazas de bloqueos de carreteras que hicieron mas temprano este martes los sectores oficialistas afines a Evo Morales durante la inauguración de un encuentro nacional en la zona central del Trópico de Cochabamba, el bastión sindical y político del ex mandatario.
La reunión fue convocada inicialmente como un congreso para renovar la directiva nacional del partido, pero como el Tribunal Supremo Electoral (TSE) decidió no supervisarlo, los asistentes decidieron convertirlo en un “ampliado nacional” para asumir medidas contra el Gobierno de Arce.
En concreto, los llamados ‘evistas’ advirtieron con bloquear carreteras para hacer “respetar” la sigla del MAS y la candidatura presidencial de Morales para los comicios generales de 2025, definida en un congreso realizado el año pasado pero que fue anulado luego por el órgano electoral.
“Ahora inauguramos este gran ampliado para tomar decisiones. Lo que se decida acá se hace en toda Bolivia, que sepa el Gobierno, que sepa el TSE”, sostuvo Morales en la reunión en la localidad de Villa Tunari, en la zona del Trópico de Cochabamba.
Antes de Morales hablaron otros sindicalistas leales al ex presidente, como el dirigente indígena Ramiro Cucho y el líder campesino Ponciano Santos, quienes incidieron en que se les acabó la “paciencia” ante la reiterada negativa del órgano electoral de supervisar el congreso del MAS.
Cucho sostuvo que no permitirán que les quieran “arrebatar” la sigla del MAS o evitar la candidatura de Morales, y anunció que van a “defender” al partido y a su líder con bloqueos de rutas.
“Solamente nos queda defender la sigla y la candidatura de Evo Morales en las carreteras. Ahora sí llegó el fin de Luis Arce”, advirtió por su parte Santos.
Arce y Morales están distanciados desde 2021 y sus diferencias se profundizaron aun más ante la necesidad de renovar la dirección nacional del partido, pues los sectores afines al ex mandatario insisten en que sea ratificado como su presidente y los leales al actual gobernante piden que haya renovación.
El TSE no ha validado los intentos de congreso de los ‘evistas’ porque no cumplieron con el requisito de hacerlos mediante un consenso previo entre las organizaciones sociales que conforman el partido oficialista.
También rechazó un congreso realizado en mayo pasado por la facción ‘arcista’, en el que eligieron al dirigente campesino Grover García como nuevo presidente del MAS, porque la convocatoria no cumplió con los requisitos del mismo estatuto del partido oficialista, por lo que Evo Morales se ha mantenido como su líder.
La candidatura del ex gobernante también ha sido motivo de polémica interna en el oficialismo, pues desde el Gobierno se ha insistido en que Morales ya no se puede volver a postular, mientras que sus sectores afines defienden que sí puede.
A esto se suma la suspensión de las elecciones primarias hacia los comicios de 2025, en la que estuvieron de acuerdo todas las fuerzas políticas menos la facción ‘evista’ del MAS, ya que Morales cree que fue parte del plan del Gobierno para frenar su candidatura.