Iñaki Peña alimenta el debate
El portero alicantino, bajo el foco desde la lesión de Ter Stegen, encajó cuatro goles contra Osasuna en el peor partido con Flick en el banquillo
Encajó cuatro goles en El Sadar en la primera derrota del Barcelona de Hansi Flick en la Liga. Poco pudo hacer en tres de los goles y aunque estuvo a punto de parar el penalti, no estuvo del todo certero en el gol de Bretones. Iñaki Peña, como todo el equipo, no tuvo el día en Pamplona y le tocó pagar los platos rotos de unas rotaciones que tampoco funcionaron. Su problema es que ahora deberá luchar de tú a tú con Szczesny, un portero consolidado y que vendrá dispuesto a comerse el mundo.
Era su segundo partido tras la lesión del alemán y como el resto del equipo se contagió de un mal inicio de partido en un campo donde nadie puede relajarse. Tampoco lo ayudó jugar con una defensa experimental y muy joven, con Koundé, Cubarsí, Domínguez y Gerard Martín. Dolorosa fue la imagen del segundo gol, en el que Bryan Zaragoza le dejó sentado con una pisada espectacular.