Courtois abre los ojos a Bélgica
El guardameta fue el primero en desligarse de la selección bajo la dirección de Domenico Tedesco. De Bruyne puede continuar ese camino.
Thibaut Courtois fue el primero en desenvainar el sable el pasado 22 de agosto. El guardameta anunció en sus redes sociales su renuncia a la selección belga. El epicentro que causó su decisión fue claro: “siguiendo lo sucedido con el entrenador y después de mucha reflexión, he decidido no volver a la selección de Bélgica bajo su dirección. Mirando hacia adelante, mi falta de confianza en él no contribuiría a mantener el necesario ambiente de cordialidad. La Federación, con la que he mantenido varias conversaciones, acepta mi posición y las razones que me han llevado a esta decisión dolorosa pero coherente.”
Un conflicto entre ambos bandos que erosionó en junio de 2023. En su segunda convocatoria al frente de los Red Devils, el italo-alemán tomó la decisión de quitarle la capitanía al madridista en el encuentro frente a Austria (partido clasificatorio a la Eurocopa 2024). El de Bree, ante esta situación, abandonó la concentración justificando unas molestias en la rodilla. La respuesta del propio seleccionador fue acusarle de dejar colgada a la selección para el siguiente partido ante Estonia. La mecha ya estaba detonada un año antes de explotar. La detonación ya contaba los días en el calendario.
De Bruyne, el siguiente
Una decisión que puede tener su continuidad con otra de las estrellas del país. Kevin de Bruyne, tras la derrota padecida en el Groupama Stadium, dejó una candente imagen sobre el césped de Lyon. En una conversación con Frank Vercauteren, asistente del seleccionador, al centrocampista del Manchester City se le pudo leer en los labios “Lo dejo, lo dejo...”. Una expresión en la que se está interpretando una posible retirada del combinado nacional. Su frustración por la derrota y los últimos malos resultados fue evidente.
“Cuando no eres lo suficientemente bueno para llegar a lo más alto, tienes que darlo todo y yo ni siquiera vi eso. Puedo aceptar que no somos tan buenos como en 2018, soy el primero en decirlo, pero no puedo tolerar la forma en que jugamos esta noche. Fue inaceptable”, declaró. Un caos que también ha incendiado en redes sociales. Entre la hinchada belga se ha hecho viral el hashtag #TedescoOut. Los pesos pesados del vestuario y la afición se oponen al técnico, que se está quedando sin aliados.
Fin de la generación dorada
El caos servido ensucia el final de la mejor generación de futbolistas de la historia de Bélgica. Aquella camada que llegó a cuartos de final del Mundial 2014 y que alcanzó el tercer puesto del 2018 se está despidiendo entre drama y drama. Mignolet, Kompany, Alderweireld, Vermaelen, Mertens, Fellaini, Mirallas, Dembélé, Defour, Chadli, Origi, Januzaj, Eden Hazard y Batshuayi cerraron su capítulo antes de la Eurocopa 2024.
Tras dicho torneo, por un motivo u otro, Courtois, Lukaku, Trossard, Witsel, Carrasco y Vertonghen no han vuelto a ser llamados. De Bruyne puede ser el siguiente en adherirse a esa gigante lista. Si el futbolista decide culminar su etapa representando a su país, Meunier quedará como el único superviviente de aquel grupo que invitaba a pensar en destrozar récords y conquistar campeonatos.