ATLÉTICO - LEIPZIG / Borrón y cuenta nueva

El Atlético de Madrid inicia esta noche su camino en la nueva Champions con la ilusión de siempre y ante el Leipzig de Vermeeren.

Patricia Cazón

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Esto es la Champions. La calma chicha, las vueltas en la cama el día antes de un reencuentro. Un grupo de operarios trabaja con sus grúas en la fachada del Metropolitano para colocar algo delante de las letras mientras las tripas del estadio ya están llenas de carteles con instrucciones y el logo de la Champions. La Champions, el viejo deseo, la ilusión siempre en septiembre. Da igual cómo sea el camino. Si como antes, con grupos y menos partidos, o desde ahora: ocho rivales de inicio, sin enfrentamientos de ida y vuelta antes de los cruces y la necesidad de quedar entre los ocho primeros para eludir un playoff a mayores (dieciseisavos). El Cholo la llama el camino de los alemanes.

Porque Alemania siempre está ahí. En la perseverancia (de ahí lo de Simeone, ese “dale, dale, que alguna vez cae...”). Porque este año la final es en Múnich (31 de mayo) y si un alemán fue quien apeó en la última (Dortmund, vuelta de cuartos), un alemán es ante quien se abre la puerta en ésta: el Leipzig, primer rival de los ocho. Un Leipzig en el que jugó Sorloth (30 partidos entre 2020 y 2022; cinco goles) y en el que juega Vermeeren, cedido este agosto tras seis meses de apenas nada (160 minutos). Esta participación es la sexta consecutiva del equipo y en cuatro de las cinco anteriores alcanzó al menos los octavos. Para Simeone es la duodécima en trece años, todas seguidas desde aquella 13-14 que fue su primera.

La Champions es también ese tatuaje de Josema Giménez en el cuello. De letra finísima, como un arañazo. “Resiliencia”, dice, y le cuenta a él mismo además de al equipo que le envuelve. El levantarse. Una y otra vez. Aunque persigan las lesiones y a veces el mundo se sienta más negro que esa tinta que grita desde su cuello resistir. Su inicio de temporada está siendo excepcional. La vieja solidez una vez perdida recuperada junto a Le Normand. Quizá por eso Simeone le elige para que se siente a su lado ante la prensa en la previa del partido ante el Leipzig. La foto del viejo Atleti, de vuelta, con dedicatoria a la Champions del futuro. El equipo lleva cuatro partidos sin encajar, en todos los minutos jugados por Josema. Ante el Leipzig, por las pruebas del técnico, entrará Riquelme en el carril izquierdo pero todos los demás se mantienen: Llorente, Le Normand, Giménez y Azpilicueta.

“Nos tenemos que exigir más”

No estará Sorloth de inicio, tampoco Gallagher, sí Julián Alvarez, con Griezmann. Enfrente, en el Leipzig de Rose que el fin de semana empató 0-0 ante el Unión Berlín, vuelve Orbán y puede recuperar su dibujo de cuatro y no cinco hombres atrás. Mantiene a Simons, siempre peligro, Openda y Sesko, referente en el ataque de Eslovenia, como Oblak atrás, y en el Atlético, 450 partidos ya. “Nos tenemos que exigir más”, que decía el Cholo ayer. Y eso también es un aviso a la nueva Champions. Tras el verano de los 185 millones en fichajes que desde hoy perseguirán en la hierba ese deseo, la gloria eterna. Esta Champions. La del borrón y la cuenta nueva.