PARÍS 2024 | ATLETISMO / Bombazo en el 100 femenino: oro para la isla de Santa Lucía
Julien Alfred, velocista del pequeño país situado en el Mar Caribe vence ante la gran favorita y campeona mundial, la norteamericana Sha’Carri Richardson.
Sin embargo, aún tenía al menos otro gran reto por delante. Derrotar a Shelly-Ann Fraser-Pryce y sus ocho medallas olímpicas (dos en el 100 de Pekín 2008 y Londres 2012) y 16 mundiales. ‘Pocket Rocket’, 152 cm de pura velocidad desatada, quería a sus 37 años una despedida olímpica a la altura de su imponente trayectoria. Y, de paso, lograr el quinto oro olímpico consecutivo para su país... pero no pudo correr en las semifinales. Desde Pekín 2008 siempre había ganado al menos una medalla en cada edición olímpica. El destino a veces es muy cruel. Alfombra roja en principio para Sha’Carri.
La penúltima ronda le mostró a Richardson que no sería tan fácil. Julien Alfred, la velocista de Santa Lucía, le ganó con 10.84 por 10.89 de la norteamericana... que se dejó ir 20 metros eso sí. Era un aviso serio de todas maneras. La bala texana, 155 centímetros y uñas kilométricas (salvo dos en cada mano cuando corre), con su pasado de polémicas, escándalos, intento de suicidio, consumo de THC y sanciones debía dar el máximo potencial de sus piernas. Llegaba el momento definitivo. Con la lluvia como inesperada invitada a la final. Y ante tanta sorpresa, llegó la definitiva.
Jamaica no revalidó el título, pero la corona no fue a EE UU... sino a Santa Lucía. Alfred demostró que lo que había mostrado en series y semifinales era real. Oro para la pequeña isla del Mar Caribe con su récord nacional incluido (10.72). Richardson tuvo que conformarse con la plata (10.87). El bronce también para las barras y estrellas merced a Melissa Jefferson (10.92).
RYAN CROUSER, REY HISTÓRICO DEL PESO.
El estadounidense hizo historia en el estadio de Saint Denis al convertirse en el primer lanzador de peso que logra tres títulos olímpicos de forma consecutiva. El ‘Gigante de Portland’ (Oregón), de 31 años, se impuso con un mejor registro de 22,90. Por terceros Juegos consecutivos, Crouser hizo doblete junto a su compatriota Joe Kovacs (22,15), que empató con el jamaicano Rajindra Campbell, con la misma distancia, pero, un peor segundo tiro.
El plusmarquista mundial (23,56) y vigente campeón universal se situó en cabeza desde el primer tiro con 22,64, y mejoró su marca en los dos siguientes con 22,69 y 22,90, lanzamientos inalcanzables para el resto de los finalistas. Luego provocó dos nulos y, con el título en el bolsillo, renunció al último.
Con esta victoria se convierte en el rey histórico del peso, ya que deja atrás a sus compatriotas Ralph Rose (dos oros y una plata en 1904, 1908 y 1912) y Parry O’Brien (dos oros y una plata en 1952, 1956 y 1960), y al polaco Tomasz Majeswki (campeón en 2008 y 2012).