Liverpool 2 Brentford 0: Díaz y Salah marcaron para darle a Arne Slot un resultado perfecto en su en casa
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NUEVO GERENTE, nuevo estilo, pero fue el mismo Mo Salah de siempre el que hizo celebrar a Arne Slot.
Jürgen Klopp tuvo que confiar a menudo en la brillantez del rey egipcio de Anfield durante la mayor parte de sus nueve años como entrenador.
El Liverpool estaba por delante, pero lejos de tener la certeza de terminar el primer partido competitivo de Slot en Anfield con tres puntos cuando Salah produjo su gol número 213 y su contribución goleadora número 301 en sus siete años en el club.
Luis Díaz había protagonizado un espectacular gol inicial y podría haber hecho más, pero el equipo de Thomas Frank no se rindió.
Al final, Salah los derrotó para gran alivio de Slot, a quien al principio se le podría haber perdonado por pensar que la bienvenida que recibió de los fanáticos del Liverpool fue un poco decepcionante.
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Tras salir del túnel detrás de sus jugadores, podría haber esperado que en los pocos minutos antes de su primer partido de liga en Anfield hubiera algunos coros entusiastas en su nombre.
Al fin y al cabo ya había conseguido algo que Klopp, Brendan Rodgers , Roy Hodgson o Rafa Benítez no consiguieron al ganar en su debut en la máxima categoría como lo había hecho ocho días antes en la derrota por 2-0 al Ipswich en Portman Road.
Pero aunque había una pancarta con su foto cerca de la caseta, él tomó asiento luciendo una sonrisa ligeramente avergonzada.
Tal vez la atmósfera había sido dictada por él, de todos modos, porque desde que asumió había repetido que quería menos caos y más calma dentro del equipo que Klopp dejó atrás.
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Por tanto, The Kop se reservó su opinión aunque en el minuto 13 ya estaban fuera de sus asientos gracias al ataque eléctrico que terminó Díaz y una victoria que, realmente, parecía sacada de la era Klopp.
Segundos antes, el Brentford ganó un córner y Ibrahima Konate se elevó para cabecear.
Salah ganó valientemente el balón en el borde del área, obligándolo a pasarle a Diogo Jota , quien simplemente salió disparado.
Esa carrera fue de apenas 50 yardas antes de que Díaz se moviera hacia la izquierda y el pase del atacante portugués fuera perfecto.
Este fue el gol número 25 de Díaz en su aparición número 100 con el Liverpool , un potente zurdazo que se coló en la esquina superior derecha de Mark Flekken.
Anfield había cobrado vida y los jugadores de Slot movían el balón con fluidez, casi con desprecio tras ese golazo.
La ventaja fácilmente podría haberse duplicado seis minutos más tarde.
Las Abejas estaban volando en círculos en ese momento gracias a los magníficos movimientos de pases de sus oponentes y Diogo esta vez entregó el balón a Andy Robertson.
El lateral izquierdo disparó raso con mucha precisión pero Flekken reaccionó brillantemente para despejar en su primer poste.
Anfield estaba en plena acción... pero luego el ruido se apagó y ese ritmo se perdió cuando los hombres de Frank se recalibraron y comenzaron a plantear sus propias amenazas.
Con la ayuda de la inteligencia y la industria del talentoso Keane Lewis-Potter y el esfuerzo de Bryan Mbuemo y Yoane Wissa, no se pudo tocar una melodía diferente.
Es más, el Brentford debería haber empatado en el minuto 32.
Mbueno lanzó un tiro libre desde la izquierda, Christian Norgaard se abrió paso entre la estática retaguardia del Liverpool pero, desde diez yardas y con el portero Alisson varado, el capitán de los Bees envió su cabezazo desviado.
Luego Lewis-Potter tuvo un estallido, Alison tomó el balón bajo y los nativos definitivamente estaban inquietos.
Robertson levantó el ánimo inmediatamente después del descanso con otro gol, Flekken despejó su cabezazo pero todavía había elementos de vacilación entre sus compañeros de equipo en la parte de atrás, precisamente la zona donde Slot quería que estuviera más sereno y decidido.
Fueron sorprendidos nuevamente por otro cabezazo, esta vez del central Nathan Collins, pero Allison reaccionó brillantemente para desviar el balón por debajo del larguero.
Esto ciertamente no es lo que el nuevo entrenador del Liverpool habrá previsto, incluso teniendo en cuenta que sus nuevos métodos todavía son un trabajo en progreso para sus jugadores.
Luego, tan repentinamente como la acción de ataque había cesado después de esos apasionantes minutos iniciales, hubo otra explosión.
Alexis Mac Allister remató de cabeza un balón que iba al poste tras recibir un tiro de esquina de Trent Alexander-Arnold.
Díaz estaba convencido de que había conseguido su segundo gol del partido con un magnífico disparo raso después de que un excelente trabajo de pies de Salah con Flekken de alguna manera lo lograra.
Sin embargo, Brentford, nuevamente sin Ivan Toney y sin parecer extrañarlo ni un poco mientras el delantero espera su traspaso, los preocupó continuamente.
Pero como lo ha hecho tantas veces, Salah cumplió justo cuando más se lo necesitaba, completando un zurdazo característico que superó al portero después de ingresar al área.
Y poco después, música para los oídos de Slot, cuando los Kop, finalmente, comenzaron a corear su nombre, pero fue Salah quien, como lo ha hecho tantas veces, realmente los envió a casa felices.
