El Barça vuelve a pagar por lo que tenía en casa
El fichaje de Dani Olmo, canterano que hizo las maletas para triunfar lejos y ahora volver, recuerda a los casos de Piqué, Cesc y Jordi Alba.
Gerard Piqué se fue al Manchester United, donde se formó en el segundo equipo con apariciones esporádicas en el primer equipo. Estuvo una temporada cedido en el Zaragoza y cuatro años después regresaba al Barcelona a cambio de 5 millones donde hizo historia ganando 30 títulos.
Con Cesc Fàbregas pasó algo muy parecido. Si Piqué se fue el United, el de Arenys se fue a Londres a jugar en el Arsenal, donde llegó a ser el capitán del equipo que entrenaba Arsène Wenger. El año 2011 fue recuperado por el Barça, que pagó 34 millones de euros.
Jordi Alba tampoco dio el paso al juvenil blaugrana y tras destacar en el Cornellà dio el salto definitivo en el Valencia, donde llegó como extremo y se reconvirtió en lateral. Fue entonces cuando el Barcelona le recuperó pagando 14 millones. Si se suma las cantidades de los tres jugadores, más los 55 millones fijos de Olmo, la cifra asciende hasta 108 millones.