OLGA KHARLAN: “Esta medalla es para los deportistas que Rusia asesinó”
Olga Kharlan, con un bronce en sable, da la primera alegría a Ucrania en los Juegos de París. “No nos rendiremos”, lanza al mundo.
Desde que empezara el conflicto con Rusia, Kharlan ha sido uno de los grandes altavoces de Ucrania para trasladar al mundo la realidad de su país. En los Mundiales del año pasado, la sablista fue expulsada del certamen por negarle el saludo a una tiradora rusa (en París, sólo compiten 15 y como neutrales). En ese momento, como dijo a este periódico antes de los Juegos, dejó de creer “en un mundo mejor”. Luego, sin embargo, la ucraniana recibió una carta del presidente del COI, Thomas Bach, asegurándole su participación en París 2024 pasara lo que pasara (pese a tener la wild-card, se clasificó igualmente por méritos deportivos). En un Grand Palais entregado, que siempre estuvo de su lado menos en semifinales, cuando se enfrentó a una local, Bach estuvo presente y fue uno de los primeros en abrazar a Kharlan, que rápidamente pidió una de las múltiples banderas ucranianas que había en las gradas para celebrar.
Hora de volver a casa
Actualmente, Kharlan entrena y vive en Italia, donde ya se instaló antes de la guerra. A raíz del conflicto, sin embargo, la ucraniana ha vuelto en pocas ocasiones a su país. “En total, habré ido unas cinco veces por tiempo de una semana”, reveló antes de ir a recoger su bronce, con toda su familia presente, algo que le alivia. “Mi madre, mi hermana, mi abuelo... todos estaban aquí y es increíble. Cuando vienen a verme, siento que están a salvo”, dijo una Olga que, tras una carrera de leyenda, tiene el futuro en el aire. “No sé si serán mis últimos Juegos, pero creo que pararé un tiempo después de París. Serán los quintos y quiero envejecer, formar una familia y tener también una vida diferente. Además, quiero tener más tiempo para estar en casa, tenemos trabajo por hacer”, dijo en AS. Lo hará con una nueva medalla en su histórico palmarés.