Oficial: Modric, hasta 2025
A sus 38 años, renueva y será primer capitán. Esta temporada se convertirá en el más veterano y laureado de toda la historia del club. Sigue una leyenda.
“Quiero seguir porque lo merezca, no porque me lo regalen. Nunca me han regalado nada en la vida y no va a ser ahora”, dijo en las entrañas de Anfield. Una frase que se convirtió en tatuaje. Modric no lo deja porque mantiene viva la llama de la ambición deportiva; y el Madrid lo renueva porque considera que todavía tiene fútbol -y de sobra-. Una sintonía que, eso sí, no esconde una novedad: como adelantó AS el 18 de mayo, Luka ha aceptado una gran rebaja salarial. Una forma de allanar el camino: entiende que está en la recta final de su carrera y hay cosas que deben cambiar. Que es normal, el ciclo natural.
Con rol secundario
También sucede en lo deportivo, aunque con matices: Modric no encajó bien, a principios de temporada, las sucesivas suplencias. Verse relegado al banquillo (una vez que entró Bellingham) fue un golpe de realidad. Pero un varapalo gestionado sin desplantes, gestos o malas caras. Luka realizó un trabajo interno, silencioso y maduro que, meses después, desembocó en lo que ya es una realidad: acepta que ahora tiene otro rol, uno más secundario. Es un líder en el vestuario, un peso pesadísimo y Ancelotti cuenta con él en las noches importantes pero, en un año de más de 70 partidos y con la feroz competencia de esa sala de máquinas, muchas veces será suplente. Ya no es indiscutible. Y Modric lo ha dejado claro: eso no será un problema.
Se queda con la ambición de demostrar que puede ser titular siempre, porque un competidor de esa envergadura jamás pierde el colmillo, pero sin morder a compañero. Esa es una línea roja. Renueva con la voluntad de que lo primero es el equipo y, después, cualquier nombre. Que ya lo dice esa frase que es un lema en Chamartín: nadie está por encima del Real Madrid. Competirá como uno más por un puesto en un medio de quilates: Tchouameni, Camavinga, Valverde, Bellingham, Ceballos, Güler y él. Y vivirá su primera temporada post-Kroos. Es el último en pie de la Santísima Trinidad.
Acechando a Pirri
Se queda el cerebro de los 534 partidos oficiales, actual 14º en la carrera (esta temporada ha superado a Chendo y Roberto Carlos) y acechando a leyendas como Guti (542), Marcelo (546, de cogerle sería el segundo extranjero, sólo por detrás de Benzema) o Pirri (561). De hecho, está a poco más de 30 partidos de entrar en el Top-10 histórico y, de vivir un año protagonista, podría superar a Camacho (577). Difícil, pero no imposible.
Puesto | Jugador | Partidos |
---|---|---|
1º | Raúl | 741 |
2º | Casillas | 725 |
3º | Sanchís | 710 |
4º | Sergio Ramos | 671 |
5º | Benzema | 648 |
6º | Santillana | 645 |
7º | Hierro | 602 |
8º | Gento | 600 |
9º | Camacho | 577 |
10º | Pirri | 561 |
11º | Míchel | 561 |
12º | Marcelo | 546 |
13º | Guti | 542 |
14º | Modric | 534 |
15º | Roberto Carlos | 527 |
Capitán y laureado
En cuanto a títulos, el resumen habla por sí solo: seis Champions, cuatro Ligas, dos Copas del Rey, cinco Mundiales de Clubes, cuatro Supercopas de Europa y cinco Supercopas de España. En total, 26 trofeos, el que más en toda la historia del Real Madrid... igualado con Nacho. Con la salida del complutense, está a uno de lograr este hito en solitario. Necesita sólo uno, de los siete que se disputarán este curso. Ya lo acaricia. Primera oportunidad: el 14 de agosto, en la Supercopa de Europa (frente a la Atalanta, en Varsovia). Un nuevo desafío, quien sabe si el último, para quien pasa a ser primer capitán del Real Madrid. Hay nuevo brazalete en Chamartín. Modric se queda. Mínimo, hasta 2025. Hasta los 39 años.