Las innovadoras técnicas de un zoológico para mantener frescos a sus animales durante la ola de calor en Estados Unidos
Los visitantes disfrutan viendo cómo los animales se refrescan con hielo, duchas y golosinas congeladas, mostrando la dedicación del personal para asegurar que cada criatura pase una época veraniega lo más agradable posible
Los osos negros disfrutan de grandes montones de hielo arrojados en sus recintos, donde pueden revolcarse, reduciendo la temperatura de la piscina a 23 grados Celsius. Las nutrias reciben bloques de hielo y peces congelados que les sirven tanto como juguetes como fuente de alimento.
Los tigres malayos se benefician de golosinas más elaboradas, incluyendo huesos de vaca congelados y leche de cabra también congelada, todo metido en bloques de hielo. Además, estos grandes felinos disfrutan nadando en sus recintos. A pesar de ser nativos de tierras cálidas y húmedas, estos animales buscan formas de refrescarse, igual que los humanos, según CNBC.
Las tortugas gigantes de Aldabra, originarias de las islas del Océano Índico, prefieren las duchas frescas proporcionadas con una manguera, que les permite sentir el alivio del agua fresca a través de sus caparazones. Este método es uno de los muchos empleados para garantizar su bienestar durante los meses más cálidos del año.
Mike Terrell, curador de experiencias con animales del zoológico, destacó que aunque todos los animales están aclimatados al clima del sur de Florida, se busca continuamente cómo mantenerlos frescos durante los días más calurosos. Los animales del zoológico fueron seleccionados específicamente por ser especies que están acostumbradas a climas cálidos, permitiéndoles estar completamente felices en un ambiente con altas temperaturas y humedad, según WFLA.
Los visitantes del zoológico encuentran entretenimiento y aprendizaje al observar a los animales mientras se mantienen frescos. Los niños especialmente disfrutan presionando sus caras contra los vidrios para ver mejor a las criaturas, creando una interacción única y educativa. Terrell también mencionó que disfrutan viendo las huellas de nariz de los niños sobre el vidrio, lo que demuestra la fascinación que estos animales logran provocar, de acuerdo con CNBC.
El proceso de descubrir qué actividades refrescantes son del agrado de los animales requiere un poco de prueba y error. Terrell explicó que los animales comunican sus preferencias de manera efectiva: si algo no les gusta o no interactúan con ello, dejan de proporcionarles ese tipo de estímulo. Esta respuesta natural de los animales ayuda a los cuidadores a ajustar continuamente sus métodos para mejorar el bienestar de los residentes del zoológico.
Las temperaturas “sensibles” en el sur de Florida, que regularmente superan los 38 grados Celsius, debido a la alta humedad, obligan al personal del zoológico a ser creativo y meticuloso en sus esfuerzos por mantener a los animales frescos. Desde técnicas simples como la distribución de hielo hasta medidas más elaboradas como la creación de golosinas congeladas, cada iniciativa está diseñada teniendo en cuenta las necesidades específicas de cada especie, de acuerdo con ABC News.
Este esfuerzo constante y detallado es esencial para el bienestar de los animales, muchos de los cuales, aunque nativos de regiones cálidas, no están acostumbrados a la combinación extrema de calor y humedad que se experimenta en Florida. Terrell y su equipo continúan innovando y adaptándose, asegurando que cada animal no solo sobreviva sino que prospere durante los intensos meses de verano.