EURO 2024 | PAÍSES BAJOS-TURQUÍA / Turquía clama por la sanción a Demiral

“Es inaceptable y es una intromisión a la independencia del fútbol”, afirma Servet Yardimci, miembro ejecutivo de la UEFA. Los ultras turcos piden hacer el saludo del Lobo a los que acudan a ver el partido a Berlín.

Pablo M. Fuentenebro
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Merih Demiral se ha sido convertido como un mártir a ojos de la afición turca. El jugador ha sido sancionado con dos partidos (por lo que se perderá seguro los cuartos de final ante Países Bajos y una hipotética semifinal) por festejar durante el encuentro de octavos ante Austria el saludo del lobo. Un gesto que supone “un comportamiento inapropiado” y que está relacionado los Lobos Grises, un grupo ultranacionalista que promulga la supremacía histórica de los turcos. Alzar el brazo y hacer los cuernos le ha costado caro al central, castigado por UEFA.

El saludo con los cuernos ha provoca una tensión diplomática entre Alemania y Turquía casi sin precedentes. Ambos países han convocan a sus respectivos embajadores tras el supuesto gesto ultraderechista. Para Turquía hay un linchamiento y una medida desproporcionada. El primer ministro turco Recep Tayyip Erdoğan ha cambiado su agenda en las últimas horas y tiene previsto acudir a Berlín a presenciar el encuentro lo que puede tensionar aún más los prolegómenos.

Las reacciones a la sanción a Demiral no se han hecho esperar. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía ha hecho un breve comunicado lamentando profundamente la decisión sobre Demiral. “Lamentamos que la UEFA haya sancionado por dos partidos a nuestro jugador de la selección nacional de fútbol, Merih Demiral. Se organizan eventos deportivos internacionales para acercar a las sociedades y los países. Esta decisión, que ha causado una profunda decepción para todos nuestros ciudadanos en el país y en el extranjero, ha reforzado la percepción de que en algunos países europeos está aumentando la tendencia a actuar con prejuicios contra los extranjeros”.

El presidente de la Federación turca, Mehmet Büyükekşi, ataca con dureza a la UEFA y la tilda de dejarse llevar por decisiones políticas. “Consideramos que la sanción de dos partidos impuesta a nuestro jugador Merih Demiral por el Comité de Ética y Disciplina de la UEFA es una decisión inaceptable, ilegal y política. Aunque no hubo ninguna declaración sobre sanciones penales en el informe del delegado de la UEFA a cargo del partido, el hecho de que la UEFA iniciara una investigación nombrando un inspector sobre el tema tras las declaraciones de algunos políticos occidentales ensombrece la independencia del proceso y la decisión.

Este castigo nunca es aceptable en esta gran organización donde nuestra Selección Nacional hizo historia al eliminar a Austria en octavos de final de la Eurocopa de fútbol de 2024 y avanzar a cuartos de final contra Países Bajos. El informe del inspector de la UEFA filtrado a medios de comunicación parciales y la decisión anunciada tan pronto también se desprenden de que nuestro amplio expediente de defensa de 27 páginas, que preparamos meticulosamente, no fue evaluado. Nuestro período de defensa terminó. Dado que la vía de apelación y apelación ante el TAS está cerrada para suspensiones de menos de 3 partidos, se nos ha quitado el derecho de apelación.

Esta decisión parcial e injusta ha decepcionado profundamente a toda nuestra nación. Nos preocupa especialmente que la decisión se haya filtrado a algunos medios de comunicación sesgados. Tales acciones respaldan nuestras sospechas de que el proceso ha sido arrastrado a la plataforma política. Esta prohibición de dos partidos es enormemente desproporcionada en comparación con las multas y sanciones suspendidas impuestas por infracciones mucho más graves, incluido el comportamiento racista en las gradas. Desafortunadamente, estas inconsistencias son el indicador más fuerte de que se aplica un doble rasero contra nuestro país. Sin embargo, uno de los rasgos más característicos de la gran nación turca es que logra mantenerse unida contra la injusticia y la anarquía. Nosotros nos enfrentamos a todas estas injusticias no sólo como equipo nacional turco, sino como nación. Esto siempre ha sido así y se lo demostraremos al mundo entero con nuestra actuación deportiva mañana por la tarde en el Estadio Olímpico de Berlín. En estos hermosos días en los que sólo queríamos que brillaran las bellezas del fútbol, hicimos nuestra justificada defensa de la manera más detallada y completa. Sin embargo, estoy seguro de que esta decisión injusta animará a nuestros apasionados aficionados de Berlín, que consideramos nuestra segunda casa, a apoyar a nuestro equipo, como lo han hecho hasta ahora, más fuertes que nunca, teniendo cuidado con las provocaciones maliciosas”.

No es la única reacción de calado. Servet Yardimci, miembro del Comité Ejecutivo de la UEFA, ha tachado de “inaceptable” la sanción con Demiral. Y la tilda de “intromisión de la independencia del fútbol”. “Me gustaría declarar que lamento la sanción impuesta por el Comité Disciplinario de la UEFA a nuestro jugador de la selección nacional, Merih Demiral, ya que es inaceptable. Solicitar un castigo por una celebración natural después del partido, en un torneo que transcurre sobre ruedas, es una intromisión a la independencia del fútbol”, según informa TRT Spor.

Se esperan horas tensas, ya que la Federación turca aún ni ha reaccionado públicamente. De momento, ha acudido al TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) para intentar suspender cautelarmente la sanción y que Demiral pueda jugar el partido de cuartos. Sí ha habido reacciones por redes sociales. Desde que se supo que Demiral estaba siendo investigado por el gesto de los cuernos, un grupo fans de Ultras turcos hizo un comunicado pidiendo a todos los turcos que acudan al partido en Berlín a mostrar el signo de los Lobos Grises... no como un gesto de racismo sino como símbolo nacional de la turquidad durante el himno nacional. Además, la cuenta de X de ‘Turkish Ultras’ pide que se utilice el hashtag #BeFairUefa como protesta a la sanción a Demiral.

Berlín, la ciudad alemana con más colonia turca de todo el territorio, vivirá momentos de tensión por lo que el encuentro se ha considerado de alto riesgo por la policía alemana ya que se espera invasión turca en el Olympiastadion de Berlín.

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