¡Endrick también está en Madrid!
Tal y como avanzó AS, el delantero brasileño ha acortado a la mitad sus vacaciones para contar lo antes posible para Ancelotti. El 21 firma su contrato y comienza los entrenamientos.
El brasileño ha adelantado unos días su llegada porque quiere formalizar lo antes posible la compra de la casa en la que ha de vivir con su familia desde este mismo verano. Ya pudo valorar varias en su anterior visita, en las pasadas vacaciones de Navidad, justo después de ganar su segundo Brasileirão. El jugador quería estar el mismo día 21 para estampar su firma en el contrato in situ.
Endrick ha perdonado sus vacaciones porque siente la necesidad de hacerse con un hueco desde el principio en una plantilla de oro en la parte de arriba con Vinicius, Rodrygo, Mbappé, Brahim… y Güler. Tan es así, que antes de que Brasil no se clasificase para los Juegos de París, él ya había hecho llegar al club el mensaje de que no iría a la cita, precisamente, para hacer la pretemporada completa e ir a la gira con el equipo blanco. Con Endrick llega al Madrid un jugador en claro ciclo ascendente, campeón por dos veces del Brasileirao, estrella en su país y fijo en la selección absoluta, con la que ha batido todos los récords de precocidad y consiguió marcar ante Inglaterra y España en Wembley y el Bernabéu, consecutivamente, con sólo 17 años.
Un plan bien trazado.
Endrick encara sus primeros meses en el Real Madrid de una manera valiente. Confía en sus posibilidades y en su fútbol para ir ganando minutos poco a poco. Todo, a pesar de una competencia que será feroz y a que necesitará, como sucedió con Vinicius y Rodrygo, un tiempo de adaptación. Aunque no hay nada firmado al respecto, el acuerdo es que Endrick forme parte de la primera plantilla a todos los efectos. Llega con mucho más bagaje que con el que lo hizo, por ejemplo, Vini, que sí aceptó jugar algunos partidos con el Castilla siempre que no le exigieran grandes desplazamientos, pero siempre se entrenó con el primer equipo.
La idea del equipo de trabajo que dirige la carrera de Endrick es esperar a que pasen los seis primeros meses de competición para evaluar la situación del jugador. Sólo en un caso de absoluto ostracismo, en el que no hubiera jugado prácticamente nada, se plantearían buscar una cesión, pues tampoco se quiere cortar la progresión meteórica que está teniendo el jugador. Con todo, la confianza en que se hará con un hueco es absoluta.