Irán instaló otros cuatro grupos de centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio
El régimen respondió así a las sanciones del OIEA y Estados Unidos, con las que condenaron este tipo de acciones, con las que está cada vez más cerca de poder fabricar una bomba con la capacidad de provocar una catástrofe
InfobaeEl Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) alertó este viernes que Irán continúa avanzando a paso acelerado en el fortalecimiento de su capacidad nuclear, ahora con la instalación de centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio en tiempo récord.
Sin embargo, en un informe confidencial que difundió el OIEA a los estados miembro este viernes, se dio cuenta de que la mitad de estas instalaciones se produjeron en cuestión de días, exponiendo una vez más la gravedad de la situación. Apenas 48 horas más tarde del anuncio del régimen, ya habían llegado las primeras confirmaciones de que dos de éstas cascadas ya estaban en el sitio. Luego, este domingo, “la Agencia ha verificado que Irán ha instalado cuatro de las ocho cascadas IR-6 antes mencionadas, en la Unidad 1 de la FFEP (Planta de Enriquecimiento de Combustible de Fordow)”, es decir, el doble desde el pasado 11 y ya la mitad de las anunciadas el 9 del mes.
El documento sumó que ninguna de ellas está en funcionamiento aún aunque mencionó que “Irán no ha especificado cuándo empezaría a alimentar cualquiera de las cascadas de la Unidad 1 con UF6″, en referencia al gas hexafluoruro de uranio, la materia prima para las centrífugas, “ni el nivel de enriquecimiento previsto”.
No obstante, esto demuestra que el régimen continúa enriqueciendo uranio con una pureza de hasta 60% y está cada vez más cerca de alcanzar el 90 por ciento, grado requerido para la fabricación de armas nucleares. Inclusive, se estima que ya tiene material suficiente para tres de éstas.
De todas formas, si bien Teherán llevaba tiempo queriendo llevar adelante esta mejora en Fordow, el anuncio de mediados de mes y la prisa por completarlo fue más bien una respuesta ante las condenas de Occidente por la falta de cooperación en materia nuclear -que incluyen las nulas respuestas en el marco de una investigación y la prohibición de entrada a varios inspectores de la comunidad internacional- así como la desestimación de los llamados de atención de los últimos años por sus grandes reservas de material de pureza cercana al grado armamentístico.
A esto se sumó, la víspera, el anuncio del Departamento de Estado de Estados Unidos de una nueva ronda de sanciones contra tres compañías involucradas en el transporte de petróleo iraní o de productos petroquímicos, por su asistencia a estas maniobras irregulares del país. “En el último mes, Irán ha anunciado medidas para seguir ampliando su programa nuclear de una manera que no tiene ningún propósito creíble y éstas son aún más preocupantes a la luz de la continua falta de cooperación con el OIEA y las declaraciones de funcionarios iraníes que sugieren posibles cambios en la doctrina nuclear de Irán”, dijo tras el anuncio Antony Blinken.