COPA AMÉRICA | PERÚ / Un Guerrero a los 40
Paolo Guerrero encara su sexta Copa América. Ídolo y máxima leyenda del Perú, el jugador busca renacer tras varias polémicas extradeportivas.
Surgido en las inferiores de Alianza Lima, Paolo Guerrero ya es historia de la Conmebol. Seis participaciones en la Copa América donde logró dos terceros puestos (Argentina 2011 y Chile 2015) y un subcampeonato (Brasil 2019), donde además fue su máximo goleador con cinco tantos. El peruano, ídolo de todo un pueblo junto a Carlos Cueva o André Carrillo, completa el Top-5 de máximos anotadores del torneo en toda su historia y colidera la tabla de artilleros de este siglo (14) junto al chileno Eduardo Vargas, un tanto por encima de Leo Messi (13).
Si bien Guerrero es para muchos el mejor jugador de la historia de Perú, no son pocos los que entonan el “lo que pudo llegado a ser” no haber sido por las polémicas. La carrera del jugador se desarrolla entre varios claroscuros, desde su imputación por consumo indirecto de cocaína (“contaminación cruzada” con té de coca), que le alejó del Mundial 2018 además de una inhabilitación de 14 meses, hasta su altercado en un control de alcoholemia en su etapa en Flamengo.
En el ocaso de su carrera, el de Chorrillos decidió volver a Perú para vivir sus últimos minutos en el campo. Ante su gente, por fin en su hogar. Con la sombra de la retirada acechando, el delantero escribe las últimas páginas de su historia con la Blanquirroja. Igualar lo de 2019 es, más que un sueño, una quimera. Pero Paolo asume el reto. El último baile antes de la despedida.