TENIS | ROLAND GARROS / Alcaraz entra en calor
El español eleva su nivel para superar al estadounidense Korda. Espera rival para los octavos de Roland Garros: Shelton o Aliassime.
El domingo, Alcaraz se enfrentará en octavos, ronda que alcanza por tercer curso consecutivo, a un rival aún por determinar, porque el partido que disputaban este viernes Ben Shelton y Felix Auger-Aliassime fue aplazado al sábado a causa de las pertinaces precipitaciones, con 5-4 y saque para el canadiense en la primera manga. Tampoco terminaron el Hurkacz-Shapovalov y el Bergs-Dimitrov. Sí el de Moutet contra Ofner en la tapada Lenglen, que ganó el francés para poder retar a Sinner.
Carlitos ya sabía lo que era superar a Korda en el Grand Slam francés, lo hizo en 2022, en la misma ronda y en sets corridos. Ahora domina en el cara a cara al número 28 del mundo, de 23 años, por 4-1. La mejoría con respecto al día de su estreno, ante otro estadounidense, JJ Wolf, es evidente, porque en esta ocasión no hay cortocircuito en mitad del partido, solo pequeños despistes después de hacer los quiebres en el primer parcial y también en el segundo. No era fácil rascar breaks frente a un notable sacador como Korda, bien adaptado a la tierra batida. De hecho, había ganado al murciano hace dos temporadas en Montecarlo.
Con una combinación ideal de buenas piernas y delicadeza en el trato de la bola, Alcaraz maneja el encuentro sin tener que recurrir demasiado a la potencia de su aún dubitativo antebrazo derecho, que sigue protegiendo con una malla compresora. Y disfruta, como le suele pedir su entrenador, Juan Carlos Ferrero, inquieto en la grada, dando instrucciones a diestro y siniestro. Al otro lado, el checo Radek Stepanek, técnico de Korda, que se retiró con un 3-1 a favor en sus duelos contra el valenciano, ninguno de ellos sobre arcilla. “Hay que ponerse duro, pero ir a por ello, que pasen cosas”, le dice Juanki a su pupilo antes del desempate del segundo set. Y pasan, dentro de un cierto caos que al final sonríe a Alcaraz, que de un derechazo derriba la resistencia del americano. Y lo celebra con un alarido tremendo.
Un tercer set espléndido
La tercera manga la empieza Charly con servicio ganado y mucha presión al resto, aunque se le escapan las primeras opciones de rotura. La siguiente, después de cazar a Sebi en una subida a la red, sí la aprovecha y pone la directa (4-1), sin perder ni un punto en sus tres primeros turnos de saque. Y sentencia con esa mano tan exquisita que tiene para esto del tenis. Al final, le sale un muy buen partido al prodigio de El Palmar en su primer test importante.
“Me has puesto una sonrisa en la cara”, le dice el gran Mats Wilander a Carlitos en la entrevista postpartido. “Es que he jugado mejor que en los partidos anteriores, sintiéndome yo en la pista. Conozco mis habilidades, y aunque es difícil jugar contra Sebastian, porque hay que correr mucho, a él le cuesta también contrarrestar mi juego”, comenta el muchacho con naturalidad. “Espero que esto continúe”. Que así sea.