Polonia interceptó una aeronave espía de Rusia en la zona del mar Báltico
Cazas polacos de la Base Aérea de Malbork actuaron contra un avión ruso que realizaba una misión de reconocimiento
Ya el pasado viernes se produjo un incidente similar cuando dos cazas F-16 polacos interceptaron el mismo avión ruso, según relató el Comando Operacional de Polonia en su perfil oficial en la red social X, antes conocida como Twitter.
Aviones británicos para colaborar
Por otra parte, el primer ministro británico Rishi Sunak anunció recientemente en un encuentro con su homólogo polaco, Donald Tusk, que el próximo año enviará cazas Eurofighter Typhoon para ayudar a “vigilar los cielos” del país, al que considera como un “aliado de larga duración”, recordando que pilotos polacos ayudaron a defender el espacio aéreo británico durante la Segunda Guerra Mundial.
Además, Sunak mostró su “orgullo” de que ambos países sean “de las mayores potencias militares de Europa” y “dos de los más firmes amigos de Ucrania”, y pidió “ir más allá” en el plano militar, según un comunicado de la oficina del primer ministro británico.
“La defensa aérea es fundamental y el Reino Unido quiere apoyar a Polonia y colaborar estrechamente con ustedes para conseguirlo. También estamos desplegando aquí más de 16.000 soldados como parte del ejercicio de la OTAN Steadfast Defender”, añadió.
Sunak también pidió a los aliados europeos tomar medidas para desbloquear los fondos rusos y usarlos para ayudar a Ucrania como forma de asumir una “mayor responsabilidad en la seguridad colectiva”.
Condena a espía ruso
En cuanto al espionaje ruso, días atrás la Justicia de Polonia condenó a dos años y medio de prisión a un ciudadano ruso que llevaba años residiendo en el país y había sido acusado de espiar para Moscú en el marco de la invasión a Ucrania.
El tribunal de distrito de la ciudad de Gdansk, en el norte del país, halló culpable al acusado en el marco de un juicio en el que también condenó a tres ciudadanos polacos por cometer varios delitos de corrupción, tal y como explicó la Fiscalía polaca.
Los fiscales señalaron que el ciudadano ruso llevaba años viviendo legalmente en Polonia, donde ejercía sus actividades empresariales. Sin embargo, al participar en actividades de grupos de reconstrucción histórica, “estableció y mantuvo contactos con militares de las Fuerzas Armadas polacas, contactos que utilizó en sus actividades en interés de la Inteligencia rusa”, señaló
Estas actividades de espionaje se habrían centrado en las unidades militares ubicadas en el noreste de Polonia y el acusado habría obtenido y recabado información sobre la estructura organizativa y de trabajo de dichas unidades, entre otras detalles que habría entregado a las autoridades rusas.