Los enemigos públicos de Taylor Swift durante su carrera musical
La artista internacional ha tenido a lo largo de su vida encontronazos bastante sonados con otros cantantes como Kanye West, Katy Perry o Miley Cyrus.
La mayor parte de ellos proceden de problemas profesionales, aunque algunos también derivan de relaciones personales fallidas. Un claro ejemplo de la primera fue, posiblemente, su desencuentro más sonado. En 2009, Taylor ganó el premio al ‘Mejor Videoclip’ en los VMA. Como era preceptivo, subió al escenario para dar las gracias, pero Kanye West interrumpió su discurso, le quitó el micrófono y defendió que tenía que haber ganado Beyoncé.
Supuestamente, al día siguiente el rapero pidió perdón, aunque su relación no debe ser especialmente buena cuando en su canción ‘Famous’, Kanye se refirió a ella como “perra”. Esta polémica terminó salpicando a Kim Kardashian, quien por aquel entonces era la mujer de Kanye. La modelo defendió a su pareja asegurando que Taylor había escuchado ‘Famous’ antes de su lanzamiento, pero una filtración en las redes sociales terminó dando la razón a Swift.
Durante muchos años, Kate Perry fue una de las amigas más cercanas de Taylor. Sin embargo, en 2013 sucedieron dos hechos que minaron mucho su relación. Uno de los bailarines de Taylor cambió escenario para irse con Katy y, además, Swift inició una relación sentimental con el ex de Kate. Con el tiempo, las dos sellaron una tregua con las dos saliendo en un videoclip de Swift.
Otra cantante con la que no existe buena sintonía es con Miley Cyrus. La actriz que dio vida a Hannah Montana cuestionó en una entrevista que Taylor fuera una buena influencia. “¿Se supone que eso es un buen ejemplo y yo no porque voy enseñando las tetas por ahí? No entiendo por qué el pecho es peor que las armas”, pronunció después de que Taylor saliera en un videoclip con un arma.
Joe Jonas, Demi Lovato -que fueron pareja después de que el exmarido de Sophie Turner “se portara mal” con Taylor-, el productor Scooter Braun y Calvin Harris son otras tantas de las personas con las que Taylor Swift no tiene especialmente buena sintonía. En este último caso fueron los corazones rotos y el orgullo los que desencadenaron una polémica irreparable.