El técnico paga el triste espectáculo de la final de Copa. A partir de julio arrancará la era Thiago Motta.
As
Massimiliano Allegri ya no es el entrenador de la Juventus.
El club bianconero ha tomado una medida inevitable ante el triste
espectáculo del italiano tras la victoria en la Copa italiana contra el
Atalanta. El de Livorno fue expulsado por unas violentas protestas (se llegó a quitar la chaqueta, la corbata y hasta casi toda la camisa), dio una patada destrozando unos focos, echó al director deportivo Giuntoli de las celebraciones por el trofeo y, por último, agredió y amenazó al director de ‘Tuttosport’. Allegri visitó hoy la sede del periódico, que publicó un comunicado en el que explicó que el técnico y Guido Vaciago superaron “el lamentable suceso”
y volvieron a la “cordial relación que siempre tuvieron”, pero el gesto
no fue suficiente para salvar el banquillo, como dejó claro la entidad
en su comunicado: “La medida surge tras los comportamientos durante y
después la final de Copa italiana que la sociedad no considera
compatibles con los valores de la Juventus y con el comportamiento que
deben tener los que la representan”.
El entrenador, que tenía contrato hasta 2025,
cierra así su segundo periplo juventino, comenzado en 2021, en el que
ganó un único título, la Copa italia de anteayer, que se suma a las
cuatro Copas, cinco scudetti y dos Supercopas levantadas entre 2014 y
2019.
En su lugar llegará Thiago Motta,
que acaba de llevar al Bolonia a una histórica clasificación a la
Champions y será justo el próximo rival de los juventini. Para el
banquillo, durante las últimas dos jornadas del curso, se valora
ascender a Paolo Montero, actual entrenador del conjunto sub-19. Allegri
deja con la Copa, entonces, y con una clasificación a la próxima
Champions, pero también con una segunda vuelta desastrosa: cosechó
apenas 15 puntos en las últimas 15 jornadas.
