Fluminense, del cielo al infierno
No ha pasado un año desde que levantó la Copa Libertadores y ahora se encuentra en los puestos de descenso del Brasileirão.
La ciudad deportiva de Flu apareció con pintadas a causa del mal momento del equipo. “Se acabó el 2023″ o " dejen de inventar”, se pueden leer en Laranjeiras, zona donde se encuentra el centro de entrenamiento del club. También aparece en el foco el técnico Fernando Diniz, al cual culpabilizan de los malos resultados de las últimas jornadas del Brasileirão. Otra de las críticas que se vieron fue la que dice “Fluminense no es un laboratorio”.
La paciencia de la afición brasileña se terminó con la derrota contra São Paulo por 2-1, provocando la caída a la zona de descenso del campeonato brasileño. Con cinco puntos en seis partidos, perdiendo los tres encuentros fuera de casa y solo ganando en Río a Vasco da Gama. Su triunfo contra Cerro Porteño le permite defender título al clasificarse a la fase final de la Libertadores.
A Fernando Diniz le consideran “científico loco” la afición brasileña, que creen que la crisis nace por sus decisiones algo alocadas como jugar sin centrales, aunque esa prueba salió victoriosa ante Colo Colo. El entrenador tiene contrato hasta diciembre de 2025 y su intención es cumplirlo. Hasta la fecha, la dirección deportiva de Fluminense no se ha pronunciado sobre la continuidad o ampliación de su técnico.