EEUU lanzó 300 nuevas sanciones que apuntan a la maquinaria bélica del Kremlin: incluyen empresas chinas que lo ayudan en su invasión
El Tesoro estadounidense señaló a varias compañías productoras y exportadoras de “objetos esenciales para la industria de defensa aérea rusa”
Con estas medidas, buscan degradar aún más la capacidad de Rusia para sostener su maquinaria de guerra, continuando una campaña multilateral para limitar los ingresos del Kremlin y el acceso al material que necesita para llevar a cabo su guerra ilegal contra Ucrania: “Las acciones de hoy apuntan a la base militar-industrial de Rusia y a los programas de armas químicas y biológicas, así como a empresas e individuos en terceros países que ayudan a Rusia a adquirir insumos clave para armas o producción relacionada con la defensa”.
A su vez, el Tesoro también sancionó a más de 80 compañías que acusa de ayudar al gobierno de Vladimir Putin a evadir sanciones o de apoyar el programa de armas químicas y biológicas ruso. Entre ellas están empresas con base en China, Azerbaiyán, Bélgica, Turquía, Eslovaquia y Emiratos Árabes Unidos, detalló el comunicado.
Las medidas anunciadas hoy llegan días después de una visita oficial del secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, a China donde pidió a Beijing que “no ayude a Rusia”, dejándole de suministrar componentes que podrían ser utilizados en la guerra contra Ucrania.
Desde el estallido de la guerra en Ucrania, China ha mantenido una postura ambigua dentro de la cual ha pedido respeto para “la integridad territorial de todos los países”, incluida Ucrania, y atención para las “legítimas preocupaciones de todos los países”, en referencia a Rusia.
Por otra parte, a mediados de abril, Estados Unidos había anunciado la prohibición de importaciones de aluminio, cobre y níquel de origen ruso, como parte de sanciones adicionales adoptadas junto al Reino Unido con el objetivo de reducir los ingresos de Moscú y debilitarle en el marco de la invasión a Ucrania.
En febrero, al cumplirse dos años de la invasión rusa, el gobierno de Joe Biden reveló la mayor salva de sanciones apuntando a más de 500 personas y organizaciones de varios países y en respuesta a la muerte en prisión de Alexei Navalny