Cómo quedó San Lorenzo tras la durísima derrota ante Riestra: vestuario golpeado y Romagnoli no corre riesgo
Ante su gente, el jueves a las 21 tendrá la chance de sacarse la bronca contra Liverpool (U) en la Copa, donde no hay margen de error.
Este domingo, San Lorenzo sufrió una de las derrotas más duras del último tiempo. En el Estadio Guillermo Laza, a metros del Nuevo Gasómetro, cayó 1-0 ante Deportivo Riestra. Lo del Ciclón de Leandro Romagnoli, con mayoría de futbolistas suplentes, fue muy malo; se podría definir como un papelón. El vestuario quedó muy golpeado y con mucha bronca. Pese al fuerte cachetazo, la situación del Pipi no cambia. Ahora, a enfocar la cabeza en la Copa Libertadores.
Al margen de que San Lorenzo volverá a jugar otra final el jueves por Copa Libertadores, Romagnoli puso un equipo alternativo para poder verlos sumar minutos y analizar su presente en competencia. Pero fue una tarde para el olvido. O para tenerla bien presente y así no repetir los mismos errores.
Pese a que el Pipi intentó de muchas maneras, no encontró respuestas adentro del campo; no le salió nada de lo imaginado. El equipo cayó en la obviedad del centro sin peligro que solo favoreció al rival y preocupa al hincha del Ciclón.
Malestar, bronca y, sobre todo, tristeza fue lo que se palpó en el vestuario tras el 1-0 final. Mucha calentura de los jugadores. Lo de San Lorenzo fue muy malo al nivel de que se podría definir como papelón.
No obstante, la situación de Romagnoli, tras cuatro partidos al mando (una victoria, un empate y dos derrotas), es la misma que antes del lamentable partido y no corre riesgo su puesto. Ante su gente, el jueves a las 21 tendrá la chance de sacarse la bronca contra Liverpool (U) en la Copa, donde no hay margen de error.
