China, Corea del Sur y Japón reafirmaron su compromiso de promover una relación “beneficiosa” para los tres países
El primer ministro chino Li Qiang mantuvo encuentros separados con sus pares, en la previa del diálogo trilateral que mantendrán este lunes en Seúl tras más de cuatro años
“La situación internacional ha tenido un impacto considerable en la relación entre nuestros países”, dijo por su parte Li, que considera que ambos países pueden “controlar con éxito las diferencias de opinión y buscar una relación constructiva y estable que cumpla con las exigencias de la nueva era”, citó dicho medio.
El primer ministro chino destacó que actualmente se están produciendo intercambios entre ambos países y que “se puede decir que la cooperación se está recuperando gradualmente”.
Durante sus conversaciones, Kishida y Li acordaron promover la cooperación en áreas como el medio ambiente, la energía y la salud. Además, según la televisión estatal china CCTV, ambos líderes acordaron convocar una nueva ronda de diálogo económico de alto nivel entre Tokio y Pekín, así como mecanismos para fomentar los intercambios culturales.
Las relaciones entre Japón y China han sufrido un enfriamiento por la estrecha alianza de Tokio y Washington, y más recientemente por el vertido del agua contaminada y tratada de la accidentada central nuclear de Fukushima, que devino en un veto a las importaciones chinas de pescado y productos del mar capturados en aguas japonesas.
Por su parte, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, y el primer ministro chino, Li Qiang, también se reunieron este domingo en Seúl para abordar potenciales proyectos conjuntos en materia económica y cooperación en asuntos regionales e internacionales.
“Creo que Corea del Sur y China deberían cooperar estrechamente no sólo para nuestra relación bilateral, sino también para la paz y la estabilidad de la comunidad internacional”, dijo el mandatario surcoreano al inicio del encuentro, según declaraciones recogidas por la agencia local de noticias Yonhap.
Yoon subrayó en su alocución la importancia de trabajar con China para abordar las crecientes incertidumbres económicas a raíz de la guerra en Ucrania y el conflicto entre Israel y Hamas, y le transmitió a Li: “Espero que podamos continuar fortalecimiento nuestra cooperación en medio de las complejas crisis globales”.
El primer ministro chino destacó, por su parte, las estrechas relaciones económicas entre los dos países y manifestó su deseo de desarrollar aún más sus vínculos para “el beneficio mutuo” y lograr una relación “en la que todos ganen”, de acuerdo al citado medio.
“China desea trabajar junto a Corea del Sur para convertirse en un vecino bueno y confiable, y en un socio solidario que ayude a ambos a tener éxito”, declaró el mandatario chino.
No se espera ningún anuncio importante en la cita trilateral del lunes. Pero simplemente reanudar las conversaciones a tres bandas era una buena señal y sugería que los tres vecinos asiáticos estaban decididos a mejorar sus relaciones, según los analistas.
Se suponía que habría una cumbre anual de los tres países tras su cita inaugural en 2008. Pero las reuniones se quedaron paralizadas desde la realizada en diciembre en diciembre de 2019, debido a la pandemia del COVID-19 y a los complejos lazos entre los tres países.
Hace tiempo que Corea del Sur, Japón y Estados Unidos instan a China, el mayor aliado y socio económico de Corea del Norte, a utilizar su influencia para persuadir a Pyongyang de que abandone sus ambiciones nucleares. Pero se sospecha que China no aplica en su totalidad las sanciones de Naciones Unidas sobre Corea del Norte y envía cargamentos clandestinos para ayudar a su empobrecido vecino a mantenerse a flote.
Temas sensibles como el programa nuclear norcoreano, las reclamaciones de China sobre la autogobernada Taiwán y la disputas territoriales en el Mar de China Meridional no estaban entre los puntos oficiales de la agenda. Algunos expertos ven probable que los tres líderes comentaran el programa nuclear de Corea del Norte, que plantea una gran amenaza de seguridad para Corea del Sur y Japón, aunque no estaba claro hasta qué punto, en su caso, se revelaría el contenido de sus conversaciones.
Los tres vecinos tienen importantes lazos comerciales entre sí y su cooperación es clave para impulsar la paz y la prosperidad regional. En total suponen en torno al 25% del producto interno bruto del planeta. Sin embargo, se han visto inmersos en sucesivas y agrias disputas por una serie de cuestiones históricas y diplomáticas derivadas de las atrocidades japonesas en tiempos de guerra. El auge de China y los esfuerzos de Estados Unidos por reforzar sus alianzas en Asia también han afectado muchos a sus relaciones a tres en los últimos años.