BARCELONA 3 - RAYO 0 / Catarsis de Pedri

El Barça gana en un partido gris, pero que sirve para consolidar el subcampeonato. Pedri, autor de dos goles, se quita un peso de encima.

Santi Giménez
As
El Barcelona acabará LaLiga segundo y jugará la Supercopa, tras ganar 3-0 al Rayo Vallecano en el partido que cerraba el primer año de exilio en Montjuïc. Un triunfo que no da para sacar pecho pero que, puestos a ser positivos, se sostiene, como es habitual en Can Barça, en clave de futuro. Pedri, que lleva tiempo sin encontrar la salida del túnel, parece que ve la luz. Salió en la segunda parte y marcó dos goles que quizás valen más que el segundo puesto si de verdad sirven para que el canario se desprenda de una mochila llena de piedras que le tiene hace tiempo paralizado.

De entrada, parecía que el Barcelona tenía prisa. No se sabe muy bien si la prisa se debía a un deseo irrefrenable de empezar a jugar el partido o bien porque cuando comenzase el partido, antes se iba a acabar la temporada. Ambos equipos estaban dispuestos para empezar a jugar a las 18:58 horas, por lo que tuvieron que estar dos minutos esperando a que se cumplieran las siete de la tarde para que la jornada unificada pudiera iniciarse al mismo tiempo en los nueve campos implicados. Hay que ver lo largo que se hacen dos minutos sin hacer nada.

Los dos minutos haciendo el pasmarote esperando que empezara el partido contrastaron con los dos primeros minutos que el Barça ejecutó en cuanto se puso el balón en juego. En ese tiempo, Lamine conecto con Lewandowski, que dio un curso para enseñar en las escuelas de fútbol sobre cómo debe de moverse un delantero centro. Amago de desmarque, pasito atrás para evitar el fuera de juego, control con el pecho y volea a la red a la media vuelta.

Parecía animarse el partido, pero fue un espejismo. Poco a poco se fue imponiendo de nuevo la realidad que ha marcado la temporada blaugrana. Una incapacidad preocupante para cerrar el partido. Poco a poco, el Rayo fue creciendo y el Barça dejó de fluir limitándose a vivir sólo cuando un Lewandowski muy motivado, puede que por los últimos cambios, puede que por la lucha por el Pichichi o por otros motivos, y por un Lamine Yamal que está acabando el curso como un veterano mientras que Cubarsí empieza a dar síntomas, absolutamente comprensibles, de que necesita un descanso porque, como a tantos, la temporada se le está haciendo larga.

Para tratar de controlar el partido y evitar las pelotas a la espalda de los centrales blaugrana, Xavi inició el segundo tiempo con Christensen en el lugar de Sergi Roberto. El cambio le dio al Barcelona más control del juego, pero la producción ofensiva no acababa de llegar. El Barça transitaba al trote por el partido en otro ejercicio de dejar pasar el tiempo sin tener en cuenta que un despiste o un accidente podía dar la vuelta a la situación y sólo ganaba 1-0.

Ter Stegen evitó el empate del Rayo en un contragolpe de Álvaro que ya fue todo un aviso. Que Xavi quiso arreglar dando entrada a Araújo, Pedri y João Félix. El canario y el portugués son jugadores de inspiración y en Montjuïc las musas les iluminaron a tiempo. João realizó una jugada digna de superclase por la banda derecha que demuestra que el portugués tiene condiciones de fenómeno, pero que las dosifica incomprensiblemente. João se rifó a todo el que le salió al encuentro y Pedri culminó la jugada y exorcizó demonios. Fue anotar ese gol catártico y Pedri marcó dos minutos después un gol que debe suponer una nueva era. La mejor noticia de la noche.


Entradas populares