El
brasileño llegará a Múnich con opciones de ser titular tanto en el eje
de la zaga como de lateral derecho por la sanción de Carvajal. Ancelotti
idea un plan para ponerle a punto.
As
Si Manchester parecía apresurado, Múnich es una realidad.
Militao tendrá un papel relevante en las semifinales de la Champions.
El cuerpo técnico cuenta decididamente con él para reforzar las
capacidades defensivas del equipo. La primera fase de su reintegración a la dinámica de la competición, que era más psicológica que física, ya se ha cumplido. Sí,
el bueno de Mili ha tenido un papel testimonial en los últimos tres
partidos del Real Madrid, los descuentos ante Athletic y Mallorca y diez
minutos (esos sí, de infarto y donde fue muy necesario) en el Etihad.
Pero esa era una transición necesaria, considera Ancelotti, que ahora ha
elaborado un plan especial para ir dándole minutos de cara a su puesta a
punto (física) definitiva de cara a las semifinales. Primero se
rodará en el Clásico, dependiendo de cómo transcurra el encuentro. Luego
ante la Real, en esta ocasión, incluso con probabilidad de ser titular.
Militao
tendrá opciones de jugar en Múnich en el centro de la zaga, junto a
Rüdiger, pero también en el lateral derecho, ya que Carvajal se perderá
el partido porque vio la tercera amarilla con la que cumplía ciclo en el
Etihad. Todo dependerá de cómo se desarrollen para el brasileño
esos dos partidos ante Barça y Real que quedan antes de la cita europea
del 30 de abril. Para la vuelta, el 8 de mayo, ya en el Bernabéu, Militao
competirá en igualdad de condiciones con el resto de los integrantes de
la zaga. Habrá otro encuentro más, este ante el Cádiz, para tener
minutos. Esas son las cuentas que echa Ancelotti con el brasileño.
Militao
se ha sobrepuesto en un tiempo récord de una dura lesión que se produjo
en el primer partido de la temporada, ante el Athletic.
Fue el 12 de agosto. El diagnóstico: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. El
mismo parte que tres días antes había dejado KO a su compañero
Courtois. La fortuna, si es que la hay en una lesión de ese tipo, es que
no tenía afectación meniscal, como sí había, por ejemplo, en el caso
del portero belga. Con todo, el brasileño siempre llevó mejor su recuperación. “Es de goma”, dicen desde dentro del club.
Y 232 días después, el 30 de marzo, volvía a una convocatoria… caprichos del destino, también ante el Athletic. Para el partido de Múnich habrá pasado justo un mes de esa reaparición.
“El mejor central del mundo”, en palabras de Ancelotti, disputó 4.496 minutos en la temporada 2021-22 y 4.230 la pasada, las dos de su confirmación en el eje de la zaga. Pilar
fundamental en la Decimocuarta Copa de Europa, su sociedad con Alaba
fue el cerrojo perfecto previo a un Courtois sin fisuras. Central
con más duelos ganados (532) en las cinco grandes ligas entre la 2021-22
y la 2022-23, cuarto en interceptaciones (152), quinto en
recuperaciones (548), quinto en despejes de cabeza (198)... Una ensalada
numérica que justifica el anhelo de Ancelotti. Militao está de vuelta.
El técnico ha ideado un plan para recuperar a su mejor hombre en la zaga
para el tramo final de la temporada.
