Federico Girotti se arrepintió de sus fuertes frases contra la AFA y el tesorero Pablo Toviggino
El delantero había sido muy crítico luego de la eliminación de Talleres de la Copa de la Liga
En la puerta del micro que trasladó a Talleres al estadio y ante la pregunta de los periodistas, Girotti expresó: “Es para cagadas si hablo, porque nos quisieron acostar y nos acostaron. Todas las boludeces que vinieron hablando y ahí tienen. Nos quisieron sacar y nos sacaron (...) Nos quieren tumbar desde hace varios meses y hoy lo lograron, nos robaron la ilusión en este fútbol que está tan manchado”, dijo Girotti después del 2-2 frente al Rojo, que dejó a ambos fuera de los cuartos de final.
Luego cruzó a Pablo Toviggino, uno de los dirigentes de AFA más cercanos a Chiqui Tapia, que había escrito en la red social X un posteo crítico contra Juan Sebastián Verón y Andrés Fassi, presidentes de Estudiantes y Talleres, respectivamente. “Toviggino sale a hablar en la semana ¿Quién es Toviggino?, sale a hablar que Verón, que nosotros, que el fútbol argentino, parece que acá los cabezas de termo tienen ventaja. Como somos un club ordenado, como les da bronca que estamos bien, así nos sacan”. Y agregó: “En este país hacés las cosas bien y parece que está mal, acá sirve ser cabeza de termo, sirve hacer las cosas mal. A los clubes que hacemos las cosas bien, como River, Estudiantes, nos quieren voltear. Nosotros veníamos acá sabiendo lo que podía llegar a pasar y pasó”.
Ahora, ante la posibilidad concreta de que la AFA lo demandara en la Justicia Penal, y de sufrir además una fuerte sanción deportiva, el delantero, de 24 años, expresó: “Pido disculpas a la Asociación del Fútbol Argentino y al Sr. Toviggino por mis dichos post partido. Mis intenciones no fueron ofender. Me dejé llevar por las emociones a flor de piel de una persona que se rompe el lomo trabajando para llevar a su club a lo más alto. Saludos”.
Después de estos dichos, Girotti no sólo había quedado expuesto a la posibilidad de tener que afrontar una demanda, sino que además podía quedar afuera de las canchas por mucho tiempo. En el contexto de lo sucedido, al delantero se le podía aplicar el artículo 158 del Reglamento de Transgresiones y Penas de la AFA, que estipula “suspensión de diez a treinta partidos, al jugador que falte el respeto debido a la A.F.A., cuerpo colegiado o dirigente de la misma, sin que medie injuria grave, ofensa o agresión”.