Estados Unidos expuso un significativo aumento en los envíos militares de China a Rusia en medio de su guerra en Ucrania
El informe de Inteligencia estadounidense evidenció que Beijing es uno de los principales proveedores de Moscú y gracias a ello puede mantener sus ofensivas sobre Kiev
Algunas de las compañías identificadas como parte de estas cadenas son North China Research Institute of Electro-Optics, Wuhan Global Sensor Technology Co., Wuhan Tongsheng Technology Co. Ltd., Hikvision y IRay Technology Co. Ltd.
Sin embargo, el riesgo no se contiene únicamente en el envío de piezas; Vladimir Putin y Xi Jinping también mantienen acuerdos para la producción conjunta de vehículos aéreos no tripulados dentro de Rusia y trabajan en la mejora de sus capacidades satelitales y espaciales. Esto último no sólo implica un riesgo para Ucrania, que queda vulnerable ante ataques con mayor posibilidad de éxito, sino que también podría aumentar la amenaza que Rusia representa en Europa, en el largo plazo.
En medio de esta alianza, que se estrechó ante el aislamiento internacional al que Moscú quedó sometido por lanzar su ofensiva injustificada, la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, viajó la semana pasada a Beijing y advirtió a funcionarios del Partido Comunista Chino que todos sus bancos, empresas y hasta dirigentes que estuviesen implicados en la asistencia a las Fuerzas Armadas rusas serían susceptibles a sanciones por parte de la administración de Joe Biden.
A la par, la Casa Blanca abrió otros canales con las autoridades del régimen, para tratar de disuadirlos de continuar con sus operaciones. Así, este mes, el secretario de Estado, Antony Blinken, tendría en agenda un viaje al país, que incluiría un encuentro con Xi para poder abordar esta cuestión.
Por su parte, desde Beijing niegan todas estas denuncias y, por el contrario, instaron a la no interferencia de potencias extranjeras. “El comercio normal entre China y Rusia no debe verse interferido ni restringido. Instamos a la parte estadounidense a que se abstenga de menospreciar y convertir en chivo expiatorio la relación normal entre China y Rusia”, sostuvo Li Pengyu, portavoz de la embajada china en Washington.
También, la semana pasada lanzó su propia ronda de sanciones contra Estados Unidos, alegando apoyo a Taiwán por medio de la venta de armamento. De esta manera, dispusieron el congelamiento de los activos de las empresas General Atomics Aeronautical Systems y General Dynamics Land Systems en China, y prohibieron a sus directivos viajar al país.
Según documentos, estas compañías participan de la fabricación de los potentes tanques Abrahams así como aviones militares, que la isla está adquiriendo para modernizar su capacidad defensiva y poder resistir a una eventual invasión china.