EMPOLI 1 - NÁPOLES 0 / El Nápoles, de desastre en desastre

Los azzurri cayeron también ante el Empoli y alargan su crisis. Tras la Champions, ahora se les complica también la clasificación a la Europa League.

Mirko Calemme
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La caída libre del Nápoles sigue sin frenos. Los azzurri cayeron en el estadio del Empoli y, tras haberse despedido de la Champions, ahora se alejan también de la Europa League. Los de Calzona marchan octavos, con dos puntos menos y dos partidos más respecto al Atalanta. Uno de los peores campeones de Italia en la historia del Calcio solo ganó dos veces en las últimas diez jornadas. Un desastre debido sobre todo al rendimiento pésimo de la fase defensiva: los napolitanos encadenan 14 encuentros consecutivos encajando goles. Y hoy lo hicieron muy pronto.

El Empoli, en las anteriores seis jornadas, ganó un partido y perdió cinco, pero saltó al campo con el hambre de quien necesita puntos para salvarse. Tras apenas cuatro minutos, Gyasi, totalmente olvidado por Natan, llegó hasta el fondo y centró para Cerri, que cabeceó plácidamente a la red celebrando su primer gol en la Serie A después de más de 1.000 días de espera.

No hubo ninguna reacción del Nápoles, que no se despertó ni con la certeza de que este año también el quinto puesto valdría la Champions. El único que lo intentó fue Kvaratskhelia, pero la falta de intensidad y concentración hizo que, antes del descanso, el Empoli estuvo a un paso también del 2-0, con un contragolpe armado por Niang y Cambiaghi que terminó con un disparo al poste.

Ante este panorama desastroso, la única medida de Calzona fue quitar a Natan, sustituido por Mazzocchi. El técnico cambió de dibujo solo en el 89′, poniendo a Simeone en lugar de Anguissa, y su equipo nunca dio la sensación de poder cambiar la historia del partido. Los partenopei no remataron a puerta ni una vez en toda la segunda parte y el Castellani celebró una victoria que coloca a los toscanos en el puesto 15, con cuatro puntos de ventaja sobre la zona roja. El Nápoles, mientras, va acabando su temporada como campeón sin objetivos ni ilusión.


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