El Thriller de Old Trafford para Liverpool deja el liderato en manos del Arsenal
El resultado tiene enormes implicaciones en la carrera por el título.
El penalti tardío de MO SALAH impulsó una extraordinaria remontada del Manchester United para darle un punto al Liverpool.
Pero el derrochador Liverpool aun así desperdició la oportunidad de volver a la cima de la Premier League al no poder capitalizar su dominio total de la primera mitad.
El equipo de Jurgen Klopp está detrás del líder Arsenal por diferencia de goles y sólo un punto por delante del tercer clasificado, el Manchester City, después de otro choque extraordinario con su acérrimo rival, el United.
Después de que Luis Díaz le dio al Liverpool la ventaja de volea, Bruno Fernandes y Kobbie Mainoo lograron remates impresionantes para darle la vuelta a un juego unilateral.
El empate de Fernandes se produjo gracias a un horrible error del joven central del Liverpool, Jarrell Quansah, que aún podría considerarse como el "momento Demba Ba" de esta temporada.
Porque el Liverpool había superado al United hasta ese momento y parecía estar regresando a la cima.
Pero Salah igualó desde el punto de penal después de que Aaron Wan-Bissaka concediera un penalti en el minuto 84 y el United desperdició una ventaja por tercer partido consecutivo.
Esto fue casi tan dramático como la loca victoria del United por 4-3 en la Copa FA sobre el Liverpool tres semanas antes.
Y mientras Erik ten Hag se enfrenta al despido en Old Trafford , ha hecho mucho para afectar la gira de despedida de Klopp, poniendo fin al sueño cuádruple del alemán y ahora dañando su apuesta por un triplete.
Era difícil saber con precisión qué caos habría estado en primer plano en las mentes del United: el desastre del colapso del jueves en Chelsea , o la gloria de su victoria en la Copa FA sobre Liverpool aquí hace apenas tres semanas.
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Este partido comenzó en una línea similar a ese clásico de la Copa FA: de principio a fin, completamente abierto y el volumen a todo volumen en Old Trafford.
Rasmus Hojlund tenía el balón en la red del Liverpool en el segundo minuto, pero tan pronto como Bruno Fernandes interceptó el pase, el danés siempre parecía fuera de juego.
El Liverpool, sin embargo, pronto se puso en ventaja: Dominik Szoboszlai estuvo cerca tres veces antes del primer gol de Díaz.
Primero, el húngaro fue enviado limpiamente, pero se lo negó una inteligente parada de Andre Onana , luego hizo ping a un guardameta justo por encima y desvió un disparo desviado desde un centro raso de Andy Robertson.
Después del caos de los cuartos de final de la Copa, esto fue algo formal: el Liverpool ejerció su superioridad, superando al United.
El primer gol llegó mediada la primera parte en un córner bien ejecutado por el Liverpool pero desastrosamente defendido por el United.
Robertson se lo entregó a Núñez, quien venció a Aaron Wan-Bissaka y Casemiro para dirigir un cabezazo hacia el segundo palo, donde un Díaz sin marcar disparó de volea al suelo y superó a Onana.
El equipo de Klopp se mostró voraz en su apetito por el segundo gol, pero díscolo en su remate.
Núñez estaba causando problemas al adolescente Willy Kambwala, haciendo apenas su segunda titularidad con el United debido a cuatro centrales en la lista de lesionados del United.
Un contraataque rápido terminó con un disparo de Salah desviado por Onana, luego Núñez, en el espacio, hizo un giro antes de que Salah disparara desviado tras un pase cruzado de Szoboszlai.
Fue tan unilateral como la victoria del Liverpool por 5-0 aquí durante los días caninos del reinado de Ole Gunnar Solskjaer, pero los visitantes no fueron tan clínicos.
Casemiro enfureció a sus propios fanáticos al patear el balón cuando Díaz cayó al suelo fingiendo estar lesionado.
Y Fernandes, que a menudo parece carecer de amigos, parecía escoger amigos imaginarios con algunos pases realmente impactantes.
En el descanso, el conteo de tiros era 15-0, que se convirtió en 17-0 antes de que United - en algún giro surrealista de la trama de Alicia en el país de las maravillas - empatara.
El intento de pase cuadrado de Quansah a Virgil Van Dijk no estuvo ni remotamente cerca de su objetivo , pero aún así fue un buen remate de Fernandes para lanzar un remate por primera vez desde casi 40 yardas sobre Caoimhin Kelleher , quien podría haberlo hecho mejor.
El resultado no fue tanto halagador para el United como un baño de leche de burra.
De repente, sin embargo, Old Trafford resonó con una canción y el United ronroneó, Alejandro Garnacho tuvo un disparo desviado y el disparo cruzado de Marcus Rashford causó pánico en Kelleher.
Aún así, el Liverpool debería haber recuperado la ventaja cuando salió de un córner del United, y en un momento dado estaban cinco contra dos, antes de que Díaz, que debería haber disparado, cruzara hacia el segundo palo donde Núñez, fiel a su forma, falló su disparo. .
Ten Hag retiró al lesionado Rashford, enviando a Antony , mientras que Klopp reemplazó a Conor Bradley , en lugar de Quansah, con Joe Gomez .
Luego lo extraordinario se convirtió en impensable y el United tomó la delantera.
Casemiro dio un pase alto a Mainoo que encontró a Garnacho. El extremo saltó un pase a Wan-Bissaka, quien se enfrentó a Mainoo, quien se giró y disparó una joya dentro de la esquina más lejana.
Fue un remate ridículo de un adolescente que es principalmente un mediocampista defensivo.
Si bien el Liverpool había desperdiciado tantas oportunidades claras, aquí estaba un niño del United que conjuraba un gol de la nada.
Pronto Onana estaba realizando un giro de Cruyff sobre Cody Gakpo , Garnacho estaba dejando pasar una oportunidad decente y una victoria del United comenzaba a parecer una clara posibilidad.
Klopp estaba furioso cuando Kambwalla solo fue amonestado por un fuerte desafío a Gómez, aunque el hombre del United lo hizo cuando recibió el balón.
Luego, Salah esquivó una clara oportunidad después de que Onana empujara un disparo de Díaz.
Sin embargo, pronto el egipcio hizo las paces. Wan-Bissaka se abalanzó sobre Harvey Elliott en su propia área, falló el balón y Anthony Taylor señaló el punto.
Salah envió a Onana por el camino equivocado y el Liverpool volvió a estar en condiciones.
Díaz esquivó una brillante oportunidad desde corta distancia y Antony disparó directo a Kelleher cuando podría haber ganado en el tiempo de descuento.
