David Luiz recuerda su máximo dolor: “El 1-7 ha sido uno de esos partidos que no se explican”
El ex central de la Selección de Brasil conversó con AS sobre algunos momentos de su paso por la verdeamarelha.
Desde Rio de Janeiro, en el complejo de entrenamientos de Flamengo (su actual club), David Luiz, titular y capitán en aquel partido junto a la canarinha, atendió en exclusiva a AS. El central habló de su paso por el fútbol europeo, el regreso a su país y, por supuesto, abordó dicho partido histórico en el mundo del fútbol.
- Es un sueño realizado el representar a tu patria, a tu país. Para mí han sido momentos muy verdaderos que viví dentro de la selección, momentos buenos y malos, pero de verdad. Todo lo que dejé, siempre fui un jugador que dejaba todo, de verdad. Representar a los brasileros ha sido siempre un sueño y algo que disfruté de la mejor manera posible. Traté siempre de dar lo mejor. Muchas veces pasa en el fútbol que uno queda bien o mal, pero ha sido que viví de forma muy intensa y honesta.
- Ganan la Confederaciones 2013, la ganan bien y daba la sensación de que eran firmes candidatos a ganar el Mundial 2014.
- La verdad, ha sido un partido atípico en el que perdemos (N. de la R.: el 7-1 de Alemania), pero fuimos el último equipo de Brasil que ha llegado entre los cuatro primeros en una Copa del Mundo. Teníamos un equipazo, ganamos un año antes a la mejor España de siempre, que venía ganando todo, pero hay momentos en el fútbol que nos se explican. Ese partido (con Alemania), ha sido uno de esos partidos que no se explican, porque hasta ese partido íbamos bien, ganando bien y luego ha sido un juego donde mucha gente olvidó lo hecho antes. Para mí ha sido una tristeza muy profunda, muy grande, pero también fue la última selección brasilera en llegar entre los cuatro primeros, entonces queda el dolor, porque teníamos la oportunidad de ganar, de hacerlo en nuestro país, porque teníamos un equipazo, pero no ha pasado lo que esperábamos.
- ¿Cómo es un vestuario luego de un 1-7?
- Solo tristeza... solo tristeza. Ahí ya no se habla mucho, no se habla más, ha sido una tristeza profunda, difícil de comprender, pero pienso que ha hecho a todos los jugadores mucho más fuertes para los años siguientes. Yo, en el sentido personal, gané más títulos después del 2014 que antes, entonces ha sido un aprendizaje de vida también.
- Dentro de esas cosas positivas que mencionó de aquel Mundial, a usted le toca marcar en octavos y cuartos. En Chile se recuerda mucho ese partido, se pensaba que podía eliminar a Brasil.
- Sí, porque tenía un equipazo también, ha sido un partido muy difícil. ¡Tuvieron el palo de Mauricio Pinilla al final! Tenían una generación increíble, me recordaba a la generación de Zamorano y Salas, que yo veía mucho cuando era niño. Ha sido un partido disputadísimo, donde cualquiera de los dos podría pasar. Pasamos en penales y, para mí, han sido especiales los partidos de octavos y cuartos, porque como dices bien, marqué, estaba siendo uno de los grandes nombres de ese Mundial. Y Chile también tenía increíbles jugadores. Tuve la oportunidad de estar aquí con Arturo Vidal, de jugar muchas veces contra Alexis Sánchez y Claudio Bravo, que fue uno de los mejores porteros del mundo durante muchos años.
