COQUIMBO 1 - RACING 2 / Coquimbo cae con polémica: le anulan un gol insólito y sufre con sus propios errores
El cuadro Pirata jugó un gran partido, mereció al menos empatar, pero se quedó sin nada. Los argentinos son líderes exclusivos del grupo.
La gran polémica se vivió en el segundo tiempo. Andrés Chávez apareció de frente al arco y con un potente disparo al ángulo batió al arquero Gabriel Arias, desatando la euforia de los miles de hinchas que llegaron al Francisco Sánchez Rumoroso. Era el empate 2-2 y un nuevo comienzo para el cuadro Pirata, pero el árbitro optó por ir al VAR y anular el tanto por una supuesta mano.
Pese a los reclamos locales el tanto nunca subió al marcador. Coquimbo Unido intentó reponerse, y buscar al empate hasta el último minuto, sin embargo, Racing mostró más oficio para manejar el partido y llevarse los tres puntos a Argentina. Mantiene su campaña perfecta, con tres victorias en tres partidos y deja a Coquimbo junto a Bragantino con tres unidades.
Loco primer tiempo en Coquimbo
Antes de la polémica, Coquimbo fue también su mayor enemigo. Tras un inicio de alto nivel, donde Luciano Cabral fue el líder de los mejores minutos, un error evitable puso el partido en contra. A los diez minutos el arquero Diego Sánchez complicó una salida que no tenía mayor peligro, y le regaló la pelota a Santi Solari, hermano de Pablo Solari, que solo tuvo que empujar el balón con el arco vacío.
El golpe fue duro para Coquimbo, que nunca volvió a mostrar la misma versión del comienzo, pero se encontró ante un inesperado regalo. A los 43 minutos el que se equivocó fue el portero Gabriel Arias. El meta de la Roja interpretó mal el pase de su compañero García, no controló el pase, y la pelota se pasó por debajo de sus pies en dirección al arco para el 1-1.
Parecía el mejor negocio para los dirigidos por Fernando Díaz antes del descanso, pero otro error evitable los terminaría condenando. A los 46 minutos del primer tiempo, en el único minuto de adición, Sebastián Cabrera le hizo un penal infantil a Almendra al intentar despejar la pelota, y el goleador Adrián Martínez no perdonó.