Cole Palmer completa un hat-trick en el minuto 101 mientras los Red Devils se desmoronan
COLE PALMER fue un fanático del Manchester United en su infancia y recibió muchísimos abusos por parte de los fanáticos visitantes.
Entonces, cómo le hubiera encantado este final increíble para hundir a sus viejos ídolos en Stamford Bridge.
Palmer, un fichaje de verano de £ 40 millones procedente del Manchester City, había marcado el 2-0 desde el punto de penalti desde el principio cuando parecía que el Chelsea se iba a llevar la victoria.
El United había dado la vuelta al partido cuando Palmer empató 3-3 con su segundo penalti en el minuto 100 después de que Diogo Dalot cometiera una falta sobre Noni Madueke.
Y eso no fue suficiente. Ciertamente no para este brillante centrocampista que simplemente tiene que ir con Inglaterra a la Eurocopa 2024.
Oliendo sangre, anotó el gol de la victoria en el minuto 101 con un disparo que se desvió hacia la red ante Scott McTominay.
Para el técnico del United, Erik ten Hag, esto fue un completo desastre.
Chelsea se adelantó con goles de Conor Gallagher y Palmer antes de que United tomara el mando con dos de Alejandro Garnacho y uno de Bruno Fernandes.
Pero Ten Hag debe saber que si el United juega así contra el Liverpool en Old Trafford el domingo, serán completamente humillados.
Habiendo visto a su equipo superado por Brentford el sábado, el holandés se habría sentido muy animado durante una hora, sólo para verlos tirarlo todo por la borda al final.
La tardía reescritura del guión por parte de Palmer también debe haber sido un gran alivio para el técnico del Chelsea, Mauricio Pochettino, después de lo que parecía un verdadero trabajo con la botella.
Pero al final, los abucheos de los aficionados locales hacia el ex mediocampista Mason Mount, que entró como suplente tardío, fueron ahogados por el puro deleite de los aficionados locales.
Después de sufrir horribles abusos en línea después de no poder chocar los cinco con una mascota, Conor Gallagher hizo un cambio adecuado.
Si bien el United también tiene jugadores como Casemiro que apenas podía correr en el medio campo, al menos tienen a Kobbie Mainoo, quien tuvo otra actuación prometedora y se recuperó bien después de cometer un error en el primer gol del Chelsea.
Mainoo cedió la posesión, Malo Gusto cargó por la derecha y su centro fue desviado por Raphael Varane y en el camino de Gallagher, quien disparó dulcemente por primera vez desde dentro del área y superó a Andre Onana desprevenido.
Cuando Palmer tomó una esquina frente a los fanáticos visitantes del United , se encontró absolutamente masacrado con el 'rechazo del City' sonando en sus oídos.
Así que Palmer habrá disfrutado muchísimo su siguiente momento tras una situación a balón parado cuando envió a Onana por el camino equivocado con otro penalti ejecutado con destreza, el séptimo de la temporada.
El United tampoco pudo tener argumentos sobre la sanción.
El extremo brasileño Antony chocó contra Marc Cucurella dentro del área y fue una decisión fácil para el árbitro Jarred Gillett.
De hecho, el Chelsea estaba tan cómodo que el United parecía en peligro muy real de implosionar espectacularmente antes del descanso.
Como resultado, no fue una sorpresa que Pochettino no pudiera ocultar su total disgusto cuando al United se le permitió regresar al juego.
Y todo fue tan innecesario.
Caicedo no estaba bajo presión cuando lanzó un pase descuidado y perezoso hacia Benoit Badiashile que cayó de manera tentadora para Garnacho.
Entró en el área y su disparo superó a Djordje Petrovic.
Pochettino no pudo controlar sus emociones, pero cinco minutos después, el técnico argentino se puso de pie, con los brazos cruzados, mientras su equipo era castigado por estar ridículamente abierto atrás.
El United avanzó rápidamente a través de Antony y Garnacho, pero aún hubo tiempo suficiente para que los jugadores del Chelsea se dieran cuenta de que Bruno Fernandes caminaba hacia el segundo palo sin ser marcado y pudo recibir un centro de Diogo Dalot.
Rasmus Hojlund hizo bien en dejarle el balón a Fernandes, quien tuvo un cabezazo fácil, pero podría haber sido un poco más difícil si Mykhailo Mudryk se hubiera molestado en retroceder y ayudar a su defensa.
La segunda mitad se puso un poco sabrosa con algunas entradas crujientes y diez Hag y Pochettino se enfrentaron cuando Harry Maguire evitó una amonestación por una entrada a Nicolas Jackson.
El día que Rio Ferdinand dijo que estaba arruinando su carrera, Marcus Rashford consiguió un gol en el minuto 65, al mismo tiempo que Jonny Evans, que sólo había entrado en el descanso, fue reemplazado por Willy Kambwala.
Y al minuto, el United se adelantó. Badiashile cometió un mal error, Rashford le dio un pase perfecto a Antony y su centro a Garnacho fue aún mejor .
Garnacho sabía que estaba a punto de ser golpeado por el portero Petrovic, pero llegó primero al balón y terminó siendo el héroe.
Luciendo bastante satisfecho consigo mismo, se sentó en un cartel publicitario y se empapó de la adulación de los fanáticos del United a unos metros de distancia.
Pero todo salió terriblemente mal.
Dalot fue castigado por una torpe falta sobre Madueke y tras un control del VAR demasiado largo, Palmer igualó a su equipo.
Pero cuando Enzo Fernández tuvo un córner al final, Palmer pidió a gritos un pase corto y luego disparó un tiro que salió de McTominay y superó a Onana.
Indique el caos. Chelsea solo pasó del puesto 12 al décimo, pero las celebraciones parecieron como si acabaran de ganar algo, y no solo el primer partido de la Premier League contra el United desde 2017.
En cuanto a sus oponentes, todavía podrían ganar un trofeo esta temporada, ya que están en las semifinales de la Copa FA.
Pero viendo esto, incluso Coventry se imaginará sus posibilidades.
