ATLÉTICO DE MADRID - ATHLETIC / El último reto ante Rulo

Atlético y Athletic, en tres puntos, se juegan el cuarto puesto, en la despedida ante la afición rojiblanca de Raúl García. Llorente vigilará a Nico y a Valverde le faltan los dos titulares.

Patricia Cazón

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Quizá pocos futbolistas representen el cholismo más puro que ese que esta noche saltará con el 22 a la espalda para jugar su última vez en el Metropolitano. Ese Raúl García que ha anunciado que cuelga las botas, con el Athletic, nueve años después de irse del Atleti y, sin embargo, sin haberse ido nunca del todo. Los tipos como él nunca lo hacen. Por sus valores, honestidad, por su grandeza en la cancha y fuera. Simeone cambió el curso de la historia del club agarrado a sus piernas y a la de todos aquellos que son sus hermanos, los Gabi, Godín, Juanfran, Koke... Todo lo que él representó y que hoy se añora en el Atlético.

Un equipo que no se rendía, que era la visita al dentista, que tiraba córners como si fueran penaltis, la solidez hecha fútbol, el abrigado 4-4-2, el “a morir los míos mueren” cada tarde en la hierba. Hoy, el Atleti que más ha encajado del Cholo, 63 goles en contra, lucha por algo que nunca lo hizo Simeone a estas alturas de Liga: no quedarse fuera de los puestos Champions. Rulo, que tanto dio, forma parte del rival que busca precisamente lo mismo. Esa cuarta plaza que es la puerta a la próxima Champions. Están en tres puntos.

El Atlético, hoy 4º, tiene 61. El Athletic, hoy 5º, 58. Lo que será mañana ya es otra historia. Si los de Raúl García ganan no solo harían hecho pleno de victorias frente al Atlético en la temporada, cuatro triunfos en cuatro partidos, en la primera vuelta y la ida y la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, también le arrebatarían el goal average, que en esta lucha por lo mismo es como un punto más. El Atleti, que ayer cumplió 121 años, tiene al Metropolitano a su favor. Su estadio en el que solo ha perdido dos partidos en un año y medio, pero, claro, uno de los rivales que le ganó fue el Barça en Liga. El otro, el Athletic, en la Copa.

Altas y bajas

Un Metropolitano que, si tiene en Raúl García todo lo que más añora del cholismo, se encuentra por primera vez con este Atleti tras la eliminación en cuartos de Champions frente al Dortmund y la posterior derrota, la semana pasada, ante el Alavés. El año del Atleti se concentra en este partido, aunque aún queden seis.

Simeone, sin Savic, sancionado, ni Memphis ni Lemar ni Paulista, lesionados, devolverá a Llorente al lateral derecho como freno anti-Williams (Nico) y a Witsel al once, mientras que Correa será la pareja de Griezmann, quien se enfrenta a su rival favorito (ha participado en 17 goles en 28 encuentros ante el Athletic en Liga, 11 los hizo y seis los dio) pendiente de que su tobillo y la fatiga le dejen ser Griezmann. Valverde acude con su once de gala pero sin sus laterales titulares por la falta de Yuri, lesionado, y De Marcos, sancionado. Puede ubicar a Lekue a la derecha y a García de Albéniz a la izquierda. Mientras otro García espera su turno en el banquillo para decir adiós desde la hierba a toda esa gente a la que tan feliz hizo. Es el penúltimo. De aquellos primeros, desde junio, ya solo en activo quedará Koke.