Arreglar la desconexión

Ancelotti necesita una mayor conectividad entre Bellingham, Rodrygo y Vinicius: en la ida ante el City apenas se dieron 30 pases entre los tres. Del entendimiento de este trío de jugadores dependerá el futuro del Madrid en la Champions League.

Agustín Martín

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“Ellos no esperaban que yo jugase por la izquierda, donde siempre está Vini. Hoy lo hemos hecho diferente, con una táctica nueva. No ha salido bien por el resultado, pero ya pensamos en la próxima semana”. Rodrygo Goes explicaba la novedad táctica impuesta por Carlo Ancelotti en el encuentro de ida de los cuartos de final de la Champions de esta temporada, algo que descolocó a Guardiola en los primeros instantes. El gol de Bernardo Silva a los dos minutos de juego le dio el mandato en el marcador, pero los blancos, con dos zarpazos (en apenas dos minutos le supo dar la vuelta al marcador), el segundo precisamente del propio Rodrygo entrando por banda izquierda. Luego llegaría la tromba de goles en la segunda parte.

El plan de Ancelotti incluía presión alta… para defender más arriba e intentar robar lo más rápido posible (según datos de StatsBomb, los blancos realizaron 213 presiones sobre jugadores rivales), lo que motivó que Guardiola explicara en la conferencia de prensa posterior al partido que jugadores seguros controlando el balón, caso de Rodri, Stones y Bernardo Silva, perdieran demasiados duelos (“Lo que ocurre (las pérdidas de balón) es que ha pasado más de lo normal”, señaló), y más físico de lo normal con jugadores como Mendy y Tchouameni en defensa, y Valverde y Camavinga en el centro del campo. Sin embargo, quien triunfó en esa faceta defensiva de recuperar el balón fue Kroos: según datos de Opta, el alemán recuperó siete veces el balón (el jugador del City que más pelotas recuperó fue el portero Ortega).

… Pero si hay algo en lo que el técnico italiano debe corregir o modificar es en la conectividad de su juego de ataque. Ante el City, y debido a ese cambio de sistema, tanto Vinicius como Bellingham no acabaron de entender lo que les exigía el entrenador: el primero debía meterse por dentro, mientras que el inglés debía estar casi en paralelo con Rodrigo para ser la primera barrera defensiva blanca. El madrileño dio 117 pases buenos de 126 intentados (una precisión del 93%). El madridista que más pases dio fue de nuevo Toni Kroos, con 57 de 59 (un 97% de precisión). En total, los blancos dieron 392 pases de 441 intentados (una efectividad media del 89%).

Pero mirando los pases que se dieron los tres jugadores que formaron el ataque, salen números muy preocupantes y a mejorar notablemente en el partido que tienen que jugar en el Etihad. Entre Vinicius y Bellingham apenas se produjeron nueve pases: cuatro del inglés al brasileño y cinco a la inversa. Peor fue entre Rodrygo y Jude: el brasileño apenas le dio un pase al inglés mientras que Bellingham le dio dos. Contrasta con los 21 pases que se dieron entre los dos brasileños: 12 de Rodrygo a Vinicius, mientras que Vini le dio nueve a Rodrygo, uno de ellos siendo la asistencia del segundo tanto madridista. Del entendimiento de estos tres jugadores dependerá el futuro del Madrid en la máxima competición europea de clubes…