Ancelotti busca su salvavidas
El técnico blanco centra el trabajo táctico en la diagonal de los centrales para contrarrestar el rico juego interior del City. Mantiene la duda: Nacho o Tchouameni.
La preparación para este partido por parte del Madrid no está siendo la habitual. Acostumbrado a jugar cada 3-4 días, el duelo ante el City de este martes le llega a los blancos tras un parón, seguido de un duelo ante el Athletic y luego de dos días de descanso y de seis sesiones en Valdebebas, íntegras para trabajar pensando en los cuartos de la Champions. Algunas voces han alertado de lo peligroso de que el equipo dejase de competir, aduciendo una posible pérdida de ritmo; no es la teoría que enarbola Ancelotti, que está encantado con este tiempo que ha tenido para trabajar conceptos concretos, algo prácticamente imposible durante la temporada.
Y esta cuestión, la de la diagonal de los centrales, importa y mucho al técnico blanco. De hecho, Ancelotti se ha referido en el pasado a la diagonal defensiva como su “salvavidas”, sobre todo tras la derrota en el Metropolitano en Liga (3-1), en la que consideró que fallaron en esa cuestión: “Esa diagonal entre los dos centrales es un salvavidas y a veces nos olvidamos”. No quiere otro olvido Carletto y así lo sabe toda la plantilla, aunque son tres los jugadores que tienen que quedarse con ello especialmente: Rüdiger, Nacho y Tchouameni.
Porque son los tres con opciones para jugar de titulares ante el City, aunque uno de ellos empezará en el banquillo. Rüdiger tiene el sitio asegurado y queda por ver quién es su compañero. Si fuese por conocimiento del puesto, Nacho es el favorito, a lo que se une que se quedó en el parón trabajando y eso le permitió descansar y afinar la maquinaria. Mientras que Tchouameni ofrece mejores soluciones por arriba, lo que no es una cuestión menor teniendo en cuenta que delante va a estar Haaland. Pero poner al francés de central obligaría a retocar el medio campo y Tchouameni pasa un buen momento ahora mismo, no conviene perder su presencia en la medular para desconectar el juego del City. En cualquier caso, la duda se mantiene. Mientras, Ancelotti quiere que les quede bien claro a los tres que, juegue quien juegue, la diagonal siempre debe estar presente.