Violencia en Cisjordania: un terrorista de la Yihad Islámica abatido y tres israelíes heridos tras la detonación de un explosivo
Según informes de inteligencia, Mohamed Adel Shalabi, de 39 años, estaba involucrado en la planificación de grandes ataques
Las tropas israelíes lo arrestaron en estado crítico y horas después fue declarado muerto.
“Unidades militares especiales israelíes se infiltraron en la ciudad y sitiaron la casa del difunto Shalabi. Poco después, un gran número de vehículos militares israelíes irrumpieron en la localidad e impusieron un bloqueo en el centro de la misma, concretamente en el barrio de Al-Jaradat, provocando intensos enfrentamientos”, indicó la agencia oficial palestina Wafa.
El Ejército israelí confirmó haber matado a Shalabi, a quien identificaron como “un agente de la Yihad Islámica involucrado en la planificación de grandes ataques”, a quien encontraron gracias a información de inteligencia del Shin Bet, el servicio de inteligencia interior de Israel.
Las tropas decomisaron un fusil de asalto y equipamiento militar en casa de Shalabi, un expreso palestino; además de detener a otros nueve palestinos en diferentes redadas a lo largo de Cisjordania.
“Nuestros combatientes en Silat Al Harithiya participaron en enfrentamientos armados con las fuerzas invasoras de la ocupación con intensos tiroteos y explosivos”, indicó la Yihad Islámica, que reivindicó como miembro a Shalabi.
Por otra parte, al menos tres israelíes resultaron heridos por la detonación de un artefacto explosivo en la ciudad cisjordana de Silat ad Dhahr, cerca del asentamiento de Homesh, según informaron responsables de los servicios de Emergencia al Times of Israel.
Oficialmente, el Ejército israelí se ha limitado a informar de que ha comenzado una operación de busca y captura contra un grupo de “sospechosos palestinos” que activaron el artefacto antes de arrojarlo contra un grupo de militares que estaban efectuando “operaciones proactivas” en la ciudad.
El Ejército no ha confirmado todavía la identidad de los heridos, uno de los cuales se encontraría en estado grave.
Cisjordania vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), y en lo que va de 2024 al menos 93 palestinos han muerto por fuego israelí, la mayoría milicianos o atacantes, pero también civiles, incluidos una veintena de ellos menores, según el recuento de EFE, tras cerrar 2023 como el año más letal en dos décadas con más de 520 muertos.
Del lado israelí, han muerto en 2024 nueve civiles en ataques palestinos, además de una soldado cuyo vehículo detonó un artefacto explosivo durante una redada militar en Yenín.
El Ejército israelí intensificó sus ya frecuentes incursiones en la Cisjordania tras el ataque de Hamás del 7 octubre y, desde entonces, han muerto unos 425 palestinos en incidentes violentos con Israel, principalmente con tropas pero también con colonos.