Tuberculosis: la importancia de la detección temprana para mejorar el pronóstico ante la enfermedad
En el Día Mundial de esta patología, cuáles son los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre su presencia en el planeta y por qué seguir un tratamiento planificado puede ser clave para un abordaje exitoso
Si bien esta infección afecta principalmente a los pulmones, también puede propagarse a otros órganos. “Se transmite de persona a persona a través del aire: por toser, salivar o al compartir espacios cerrados por mucho tiempo. Los síntomas más importantes son la tos persistente o con eliminación de sangre, dolor en el tórax, debilidad, cansancio y falta de apetito, seguida de pérdida de peso, fiebre, escalofríos y sudoración nocturna”, resaltó la doctora Ana Putruele (MN 55966), jefa de la División de Neumonología del Hospital de Clínicas. Desde esta última sostienen que, siguiendo el tratamiento planificado, se alcanza una tasa de curación del 90% de los casos.
Pese a que es curable y prevenible, la tuberculosis es una de las enfermedades infecciosas más letales del mundo según la OMS, que también postula que “sigue siendo la causa principal de muerte entre las personas con VIH”.
En ese tono, para la doctora Putruele, “la detección temprana mejora el pronóstico de la enfermedad; esta afección se trata y se cura, es el concepto más importante. Se trata con una combinación de cuatro medicamentos y se suele administrar al paciente en un lapso de seis a nueve meses. La vacuna BCG, que es gratuita y obligatoria en nuestro país, se aplica en los recién nacidos para prevenir las formas graves, en los primeros años de vida”.
Y repasó que, históricamente, el norte de nuestro país suele ser la región donde más contagios se observan, sobre todo en Salta y Jujuy, aunque en la Ciudad de Buenos Aires también se suelen observar casos. Asimismo, existe una leve predominancia en el sexo masculino y en edades entre los 30 y los 50 años.
“En Argentina existen más de 11000 casos y más de 700 muertes al año. Resulta clave esta fecha, ya que se suele asociar a la tuberculosis a una enfermedad del pasado y después de la pandemia vemos cada vez más”, dijo Putruele.
Uno de los grandes problemas con esta enfermedad es que “si la persona enferma toma irregularmente la medicación puede crear formas más difíciles de tratar, que son las formas resistentes, y que requieren de un esfuerzo mayor del sistema de salud. Uno de los desafíos más importantes para nosotros es que el paciente cumpla con el tratamiento planificado, ya que, una vez completado el mismo, a los seis meses se alcanza una tasa de curación del 90% de los casos. En el Hospital de Clínicas existe el sector de atención de pacientes con Tuberculosis, donde hemos tenido buenos resultados y nos ha ido muy bien con el tratamiento de la enfermedad”, cerró la doctora.