Racing volvió a la terrenalidad de un conjunto inofensivo, después de ganar el clásico: 0-0 contra Platense
En Vicente López la Academia cayó en rendimiento y generó una sola ocasión de gol; aún no aprovecha el potencial de un plantel que tiene para más
Como fuera, los aplausos tenían sustento. Tan sólo un día de trabajo como preparadores tuvieron Favio Orsi y Sergio Gómez para preparar a Platense para este partido contra Racing. Hace poco más de una semana la pareja entrenaba a Atlético Tucumán. Pero así de rápidas van las cosas en el fútbol argentino, que a poco más de un mes del comienzo ya efectúa la octava jornada. A Orsi y a Gómez, con pasado calamar en sus épocas de futbolistas, 24 horas les alcanzaron para entender qué precisaba el equipo. “Nosotros tenemos un sentimiento especial por el club. Siempre fue un deseo dirigir a Platense y decidimos ponerle el pecho a esta situación y acompañar en este momento para todos juntos ir llevando al barco a donde nosotros queremos”, dijo Gómez en lo previo. Y ambos cumplieron.
Con un esquema de cinco defensores, cuatro mediocampistas e Iván Ronaldo Martínez como llanero solitario en la delantera le complicó el partido a la Academia, que llegaba a Vicente López con la euforia del triunfo en el clásico de Avellaneda. Gustavo Costas decidió preservar a Juan Fernando Quintero, que arrastraba molestias en una rodilla desde antes del cruce con el Rojo. Pero mantuvo el dibujo táctico. Y a la Academia pareció sobrarle un hombre en la defensa mientras a Adrián “Maravilla” Martínez y a Maximiliano Salas les faltaba compañía en el ataque.
El compromiso del equipo local para la fricción emparejó el partido. Con unos primeros minutos de cautela, después Platense llevó el juego a la mitad de la cancha. Peleó por cada pelota. Y maquilló la diferencia de jerarquía que hay entre ambos planteles. El paraguayo Martínez, en la soledad, se las ingenió para ser peligroso. Bajó un centro para una aparición de Iván Gómez, que definió alto en la ocasión más clara de la primera mitad. Y generó una falta en la puerta del área, que valió la tarjeta amarilla para Santiago Sosa.
El vestuario de Racing, a oscuras
Para salir a jugar el segundo tiempo, Costas mostró el peso de su banco de suplentes. Los colombianos Quintero y Roger Martínez saltaron al campo, en lugar de Baltasar Rodríguez y Salas. La idea fue hacer más juego asociado para evitar los largos lanzamientos del primer período. Se dio de apenas de a ratos. Los Martínez, Roger y Maravilla, se encontraron con una hermosa pared en la mitad de la cancha. El zurdo, después de casi una hora de juego, logró verle de cerca la cara al arquero Juan Pablo Cozzani. Definió con clase, pero la pelota salió pegada a un palo. Fue la posibilidad más nitida de un encuentro al que el 0 a 0 le quedó pintado.
La de Maravilla fue la única vez que la Academia pisó con peligro el área ajena. Los nombres propios no dieron soluciones a Costas, que a falta de diez minutos tiró a la cancha a Johan Carbonero. Como ya le había ocurrido en la primera fecha ante Unión, el tridente de colombianos no tuvo conexión en el ataque. El consuelo para los de Avellaneda es que mantuvieron el invicto en su arco como visitantes: en los cuatro partidos que jugaron fuera del Cilindro (Estudiantes, Newell’s, Independiente, Platense) no les hicieron goles.
Compacto de Platense 0 vs. Racing 0
En este inicio de año, Racing ya mostró que el traje de equipo combativo le queda cómodo. Con el empuje de los refuerzos que pidió Costas (Sosa, Agustín García Basso, Bruno Zuculini, Maravilla Martínez y Salas), acompañado por el talento de Quintero, cosechó puntos y triunfos. Pero aún debe aprovechar la calidad y variedad de su plantel, como si no se acostumbrara a la abundancia. Y el ritmo del fútbol local no da oportunidades. Ahora, con esta igualdad contra Platense, es posible que termine la fecha fuera de la zona de los cuatro equipos que se clasifican para los cuartos de final de la Copa de la Liga.
El próximo examen será pronto y como local, otro de los ítems que la Academia aún debe poner en favor en 2024: el martes, ante Sarmiento. Una nueva oportunidad de seguir descubriendo las distintas caras que tiene este Racing.