El partido del presidente Erdogan perdió terreno en las elecciones municipales de Turquía ante el avance de la oposición
Con el 58 % de las papeletas escrutadas, el CHP mantiene una ventaja de 250.000 votos en el todo el país, un llamativo vuelco respecto a las elecciones locales de 2019
Además, no solo mantiene las ciudades de Estambul y Ankara, conquistadas en 2019, así como sus feudos habituales de la costa occidental y mediterránea, sino que también está ganando en algunas plazas fuertes del AKP, como Bursa, cuarta ciudad del país.
“Se ha dado un claro mensaje al Gobierno: Queremos que nos devuelvan el Estado de derecho, un país de todos los colores, donde las diferencias son riqueza”, dijo Özel en un discurso transmitido en directo por la cadena NTV.
Pidió a los simpatizantes de su partido “celebrar de la forma más silenciosa e íntima posible, sin molestar a los seguidores de otras formaciones” y no vengarse por derrotas pasadas.
Si los resultados provisionales se confirman, el AKP ha sufrido un considerable batacazo, ya que lidera el recuento en solo 25 provincias, cuando hasta ahora gobernaba en 38, mientras que el CHP parece conquistar 35 en lugar de las 23 que tenía desde 2019.
Especialmente llamativa es la derrota del AKP en Estambul, que esperaba recuperar en esta cita con las urnas y donde el actual alcalde, el socialdemócrata Ekrem Imamoglu, tiene una ventaja de casi 10 puntos y más de medio millón de votos con el 70 % escrutado.
“Estamos en primer lugar con una ventaja de más de un millón de votos (...) Ganamos la elección”, declaró a la prensa Imamoglu y añadió que esos resultados se basaban en el escrutinio del 96% de las urnas.
En Ankara, el alcalde del CHP, Mansur Yavas, lidera incluso con una ventaja de 25 puntos; en Esmirna, el CHP tiene 11 puntos en ventaja, y en Bursa, más de 7.
Parte del retroceso del AKP se debe a la subida de su hasta ahora aliado, el partido islamista fundamentalista Yeniden Refah (YRP), que avanza incluso al cuarto puesto en número de votos, aunque solo lidera en dos provincias, dominadas hasta ahora del AKP.
Por otra parte, los partidos que acudían a las últimas citas electorales en alianza con el CHP y ahora han presentado candidatos propios, han cosechado resultados muy bajos, lo que ha favorecido al CHP.
En un país que se enfrenta a una inflación oficial del 67% en 12 meses y a la devaluación de su moneda (de 19 a 31 libras por dólar en un año), los votantes al parecer se sintieron tentados a dar la ventaja a los opositores al jefe de Estado.
Para los observadores, el nivel de participación, tradicionalmente alto, será una indicación de su adhesión al gobierno.