El cáncer de Kate Middleton, la estocada a una familia real británica que vive su peor momento desde la muerte de Isabel II
La enfermedad ha golpeado duramente a los Windsor y mantiene al rey Carlos y a la princesa de Gales alejados de sus respectivos compromisos
Kate Middleton ha decidido dar la cara después de haber estado en el centro de un huracán mediático que ha abierto el debate sobre la privacidad de los royal y la comunicación de enfermedades. Entretanto, el príncipe Guillermo tendrá que sobreponerse al duro mazazo y primar su condición de representante de la Corona, una institución que le necesita más que nunca como heredero al trono. Lo hará con el apoyo de la reina Camila, quien también tendrá que aparcar su dolor para servir a la monarquía.
El cáncer de Carlos y Kate sume a la familia real británica en su peor momento desde la muerte de la reina Isabel II. Con el rey y la princesa fuera de juego, Camila y Guillermo han tenido que asumir un papel para el que ni la más estricta educación palaciega prepara a nadie. Entretanto, se han visto obligados a lidiar con el foco público, las especulaciones y los escándalos que han desestabilizado a su familia y a la institución.
Un revés tras otro
Los Windsor se enfrentan a la enfermedad, pero también a la incertidumbre y al miedo, sentimientos que no son bien recibidos en una institución que no puede permitirse el lujo de mostrar signos de flaqueza y humanidad. “A la reina Isabel nunca le pasó nada. Fue una vez al hospital, que se sepa”, explicaba hace unos días Carmen Duerto a Infobae España. Y no le faltaba razón. Algo está cambiando en una Casa Real británica que, pese a las acusaciones de hermetismo, ha comunicado al mundo que el rey y la princesa tienen cáncer como otros tantos miles de personas corrientes alrededor del planeta.
El monarca y su nuera no son los únicos royal británicos que luchan contra esta dura enfermedad. Sarah Ferguson, exesposa del príncipe Andrés, desvelaba el pasado enero que padece cáncer de piel tras haber superado en 2023 un cáncer de mama.
En medio de este espinoso camino que atraviesa, la familia real también ha tenido que enfrentarse a dos tristes pérdidas: la de Ian Farquhar, íntimo amigo de Carlos III y Camila; y la trágica muerte de Thomas Kingston, marido de Lady Gabriella y excuñado de Kate.
Está por ver cómo afecta esta nueva situación a los compromisos públicos de una Corona cuya presencia queda claramente mermada por las enfermedades de su titular y su futura consorte. Sin embargo, el comunicado de Kate puede apaciguar la situación y favorecer la comprensión hacia una familia que ha recibido un revés tras otro y que ahora debe compaginar el servicio a un país con el trance de luchar contra una grave enfermedad.