Cómo los tratamientos que alivian la ansiedad pueden reducir los riesgos cardíacos
Un estudio reciente ha revelado la importancia de cuidar la salud mental si se tiene enfermedades cardíacas. Los hallazgos de los investigadores de la Universidad Estatal de Ohio, en Columbus
La psicoterapia, los medicamentos para controlar el estado de ánimo o una combinación de ambos “se asociaron con una reducción de hasta un 75 por ciento en las hospitalizaciones o las visitas a la sala de emergencias”, señaló el investigador principal, el Dr. Philip Binkley, vicepresidente ejecutivo de medicina interna de la Universidad Estatal de Ohio, en Columbus.
La ansiedad y la depresión son comunes en las personas con insuficiencia cardiaca, dijo Binkley en un comunicado de prensa, y se sabe que la salud mental afecta al riesgo de una persona de otros problemas de salud. “La enfermedad cardiaca y la ansiedad/depresión interactúan de tal manera que cada una promueve a la otra”, dijo.
En este estudio, los investigadores observaron a más de 1,500 personas admitidas en el hospital por arterias bloqueadas o insuficiencia cardiaca. Alrededor de un 92 por ciento de los participantes en el estudio habían sido diagnosticados con ansiedad y un 56 por ciento con depresión antes de su hospitalización.
El estudio encontró que la combinación de medicamentos y psicoterapia redujo el riesgo de hospitalización entre un 68 y un 75 por ciento, el riesgo de una visita a la sala de emergencias entre un 67 y un 74 por ciento, y el riesgo de muerte prematura por cualquier causa entre un 65 y un 67 por ciento.
La terapia sola redujo el riesgo de hospitalización entre un 46 % y un 49 % y las visitas a urgencias entre un 48 % y un 53 %, mientras que los fármacos solos redujeron las hospitalizaciones entre un 47 % y un 58 % y las visitas a urgencias entre un 41 % y un 49 %.
La ansiedad y la depresión pueden contribuir a la enfermedad cardiaca al activar el sistema nervioso de lucha o huida, lo que provoca aumentos en la frecuencia cardiaca y la presión arterial, dijo Binkley.
“Espero que los resultados de nuestro estudio motiven a los cardiólogos y a los profesionales de la atención de la salud a realizar pruebas rutinarias de depresión y ansiedad, y demuestren que los modelos de atención colaborativa son esenciales para la gestión de la salud cardiovascular y mental”, concluyó.
Más información: Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. ofrecen más información sobre las enfermedades cardiacas y la salud mental.