CHAMPIONS (1/8, VUELTA) | ARSENAL 1(4)-PORTO (2) 0 / Raya, el héroe de Arteta
El Arsenal se clasifica a los cuartos de final en la tanda de penaltis gracias a una parada del portero español. Leandro Trossard empató la eliminatoria en la primera parte y Pepe dio un recital defensivo a sus 41 años.
Ødegaard doma al dragón
Mikel Arteta pidió energía desde el primer minuto y Martin Ødegaard fue el primero en alzar el puño hacia la grada y tirar de su equipo. El capitán hizo de capitán, liderando una presión gunner muy adelantada, y protagonizó también los primeros acercamientos locales sobre la meta de Diogo Costa.
Pero el Oporto, por muy juntas que estuvieron sus líneas defensivas, no había viajado hasta el norte de Londres para encerrarse en su propio área. Los aguerridos pupilos de Sérgio Conceiçao se asomaban cada cierto tiempo por las inmediaciones de David Raya. El portero español tuvo incluso que realizar una destacable intervención al disparo desde el interior del área de Evanilson. Eso sí, lo que mejor estaba haciendo el cuadro portista durante los primeros 40 minutos fue defender. Liderados por un Pepe inconmensurable, que sacó un centro de Ben White con el que Kai Havertz ya se relamía en el segundo palo, el Porto no sufrió en exceso.
El cuadro visitante redujo tantas marchas cuanto pudo a los gunners, hasta el punto que los aficionados locales se llevaron todo el primer tiempo pitando las pérdidas de tiempo de los pupilos. Pero a quien no pudieron frenar fue a Martin Ødegaard. Al filo del descanso, el noruego vio un hueco en la zaga visitante que muchos ni siquiera serían capaces de intuir para habilitar a Leandro Trossard y que el belga, con una extraordinaria definición, estrenase el marcador. Estallido del Emirates Stadium y eliminatoria empatada.
Un muro llamado Pepe
Sin impacientarse y jugando con la tranquilidad que da el haber hecho lo más difícil, que era abrir el primer agujero en el muro portista, el Arsenal se convirtió en el amo y dueño del balón, y del partido, durante los segundos 45 minutos. Ahora sí, los pupilos de Mikel Arteta metieron a todo el Oporto en su área. Lo que sí hizo perder los nervios a Mikel Arteta, y terminar viendo la amarilla por protestar, fue el gol anulado a Martin Ødegaard. El colegiado señaló una falta de Kai Havertz a Pepe antes de que el noruego cazase el rechace y anotase el 2-1. El agarrón de la camiseta del alemán al portugués negó el tanto al capitán gunner.
Tras una fase de cierto descontrol en el que David Raya tuvo que emplearse nuevamente a fondo para evitar el gol de empate de Sérgio Conceiçao, los visitantes trataron, otra vez, de bajar pulsaciones al partido. Entonces, Mikel Arteta reaccionó con la entrada de Gabriel Jesús. El primer cambio en más de 80 minutos de encuentro. El brasileño, así como Martin Ødegaard escasos instantes después, gozaron de dos grandes ocasiones para cerrar el pase a cuartos de final. Sin embargo, la eliminatoria se iría a la prórroga.