Caso Metástasis: el testimonio de Mayra Salazar salpicó a políticos, jueces y hasta a figuras de la farándula
La la ex relacionista pública de la Corte Provincial del Guayas habló casi dos horas y dio nombres, detalles y fechas de la red de corrupción
Según contó, Salazar es amiga de la esposa del asesinado líder de Los Choneros, alias Rasquiña. Ya involucrada con estos personajes, Salazar empezó a relacionarse con el narco asesinado Leandro Norero, quien le pidió que se comunicaran solo por la aplicación Threema. El usuario de Salazar era “Así es mejor”.
En 2022, cuando cayó preso Norero, Daniel Salcedo, sentenciado por corrupción y también procesado en el caso Metástasis, dijo a Salazar que podía recibir al narco en la Cárcel 4, en Quito. Salazar contó que Norero no aceptó la oferta porque en esa prisión estaba el ex vicepresidente Jorge Glas y no quería que los vinculen. “Yo hice la conexión entre Norero y Salcedo”, dijo. El testigo protegido Marcelo Lasso, ex compañero de celda y persona de confianza de Norero, declaró que Norero conversaba con el ex presidente Rafael Correa sobre la liberación de Glas.
Al igual que el testigo Lasso, y como sostiene la Fiscalía, Salazar también habló de la buena relación entre Norero y el ex director del Servicio de Cárceles, Pablo Ramírez. Luego de estar frente a esa institución durante cuatro masacres carcelarias durante el gobierno de Guillermo Lasso, Ramírez fue nombrado director nacional Antinarcóticos. Hoy Ramírez es uno de los 52 procesados del caso, pues habría recibido dinero del capo a cambio de otorgarle privilegios dentro de la prisión.
La Corte Provincial del Guayas
Mayra Salazar confirmó que realizó la campaña de comunicación para favorecer a Fabiola Gallardo, procesada en el caso Purga, quien se convirtió en la presidenta de la Corte Provincial del Guayas y que estuvo en funciones hasta este año. Salazar confirmó que el ex legislador socialcristiano Pablo Muentes pagaba su salario de USD 2.500. Ella cobraba los pagos en la casa de Muentes, en un sector exclusivo de Guayaquil conocido como Isla Mocolí.
Tras dos meses trabajando en la Corte Provincial del Guayas, Salazar contó que recibió un nombramiento que ella no firmó y que fue tramitado por Pablo Muentes ante Wilman Terán, entonces presidente del Consejo de la Judicatura. Muentes “manejaba a los vocales del Consejo de la Judicatura”, dijo Salazar.
La testigo protegido indicó que su trabajo, pagado por Muentes, incluía atacar con cuentas trol en Twitter (ahora X) a Ricardo Noboa, abogado del Banco del Pacífico; a María Josefa Coronel, entonces directora de la Judicatura del Guayas; y al periodista Guillermo Lizarzaburu.
La manipulación de la justicia era tal que los magistrados que no fallaban a favor de los pedidos de Gallardo o Muentes, como castigo eran trasladados a otras salas de la Corte, relató Mayra Salazar.
Muentes vs. el Banco del Pacífico
Muentes utilizaba su poder político a su favor dentro de la Corte Provincial del Guayas. Eso le habría permitido obtener una sentencia favorable e impensable en un juicio que inició el Banco del Pacífico en contra del ex legislador y de su esposa, también detenida en el caso Purga. Muentes y su esposa fueron demandados por no cancelar una deuda de USD 383.000 con el mencionado banco. En respuesta, el matrimonio interpuso una acción de habeas data y pretendieron “justificar su presunto pago de las referidas deudas con la utilización de notas de crédito aparentemente falsas o adulteradas, bajo la intención de que el banco reconozca la cancelación de la deuda”. En un giro sorprendente, el matrimonio no solo logró no cancelar la deuda sino que el juez dispuso al Banco que pague USD 4 millones por los daños causados a Muentes y a su esposa.
El juez que conoció la causa del matrimonio y falló a su favor también está detenido como parte del caso.
Mayra Salazar dijo que le encargaron gestionar el habeas data que Pablo Muentes presentó sobre la deuda del Banco del Pacífico. La mujer aseguró que los comprobantes presentados por el político fueron falsificados y que manipularon la justicia a su favor. En su relato, Salazar contó que aprendió, junto a una funcionaria, cuál era la frecuencia de sorteos de las salas en la Corte del Guayas. Cuando supieron cómo funcionaba, ingresaron el caso de la deuda de Muentes para que cayera en la sala que requerían.
Las tierras de Muentes
Como el asesinado político Fernando Villavicencio dijo de Pablo Muentes, este traficaba con tierras a través de su primo, de acuerdo con el testimonio de Mayra Salazar. El primo de Muentes tenía “tres cédulas y dos licencias” que servían para esos trámites.
“Yo no sé si el señor Fernando Villavicencio obtuvo la misma información que yo he conocido (de Pablo Muentes)... Tal vez ahí encontremos la motivación (del asesinato)”, dijo. Salazar aprovechó ese momento de su testimonio y responsabilizó a Pablo Muentes en caso de que atenten en su contra.
Por los reportajes de Guillermo Lizarzaburu, este se volvió blanco de ataques de Muentes, según relató Mayra Salazar. Muentes persiguió legalmente al periodista y “ganó en todas las instancias en Guayas”.
Fabiola Gallardo y sus contactos
Gallardo quería conocer a Salcedo porque le parecía “guapo”, dijo Mayra Salazar, quien los presentó. Gallardo y Salcedo conversaban por la aplicación Zangi. Para una causa acordaron pagos de USD 50 mil para los jueces Guillermo Valarezo, Henry Taylor y Gallardo.
También, la ex presidenta de la Corte del Guayas pidió a Mayra Salazar que contacte a alias Fito. Gallardo quería hablar con el líder de Los Choneros sobre su traslado entre prisiones. Gallardo “tenía línea directa” con el criminal que ahora está prófugo, dijo Salazar. Esa relación entre el narco y Gallardo era evidente. La testigo relató que alias Fito envió flores, una cadena de esmeralda y USD 6.000 a Gallardo para que “le ayude con la diligencia”. Muentes reclamó a Mayra Salazar por el contacto que buscaba hacer entre Gallardo y alias Fito: “Muentes tendría acercamiento con varios líderes de organizaciones delictivas”, dijo Salazar.
El ex suegro de Daniel Noboa, la alcaldesa correísta y el hijo del Chapo
Según Mayra Salazar, el ex suegro de Daniel Noboa, Roberto Goldbaum –a través del ex vocal de la Judicatura, Xavier Muñoz– arreglaba fallos judiciales y perseguía a los abogados que defendían al ahora presidente en sus causas.
Asimismo, Mayra Salazar reveló que conversaba con Johana Franco, una ex prisionera, cuya pareja de nombre Christian tenía contactos de una avioneta para transportar droga. Dichos contactos los habría hecho el sujeto mientras trabajaba en el gobierno de Rafael Correa, según contó la testigo.
En referencia a sus chats, Mayra Salazar mencionó que tenía un amigo que “está con el hijo del Chapo”. Se trata de Christian Peña, ex policía y abogado, a quien conoció en la campaña de María Fernanda Vargas, en la que Salazar participó. Vargas buscaba ganar la alcaldía de Simón Bolívar, apoyada por el partido de Rafael Correa. Según la testigo, Peña representaba a Vargas en un caso de asesinato sucedido en Salinas.
“Mi fin habría sido la muerte”
Mayra Salazar agradeció a la fiscal Diana Salazar por investigar la red de delincuencia organizada. “Mis actuaciones no fueron las correctas... Fue el 13 de diciembre que mi vida tomó otro rumbo y fue el fin de la Mayra Salazar que ustedes están conociendo”, dijo entre lágrimas.
La testigo dijo que la mujer de los chats revelados por la Fiscalía “murió cuando entró al centro de privación de libertad... Con mi aporte a la justicia en algo podré enmendar lo cometido”. Además, pidió disculpas al juez y a los ecuatorianos y le dijo al magistrado que su fin no habría sido la prisión: “Mi fin habría sido la muerte”, aseguró.
“Señora fiscal (Diana Salazar) le agradezco por hacer esta investigación. Si no se hacía público, yo seguiría teniendo contacto con estas personas que no me han aportado en nada”, dijo Mayra Salazar al concluir su testimonio.