Macron no descartó el despliegue de tropas en Ucrania y anunció una coalición para enviar misiles de mayor alcance
El presidente francés consideró que frente al incremento de la agresividad rusa “no se puede esperar”
“Haremos todo lo necesario para que Rusia no pueda ganar esta guerra. Y lo digo con toda la humildad que hay que tener cuando nos fijamos en los dos años que acaban de pasar”, apuntó.
El presidente francés consideró que frente al incremento de la agresividad rusa, tanto en suelo ucraniano como contra el resto de los aliados europeos, “no se puede esperar” a dar una respuesta y asumió una “ambigüedad medida” sobre el envío de tropas.
Fue el primer ministro eslovaco, el populista Robert Fico, quien puso esta medida encima de la mesa y aunque no recibió el respaldo mayoritario se convirtió en la gran novedad del encuentro, porque como resumió Macron, “hay que hacer todo lo posible para que Rusia no gane esta guerra”.
Por su parte, Macron se referió a “cinco categorías de acción” en las que los responsables europeos han acordado invertir recursos: “La ciberdefensa, la coproducción de armas y municiones en Ucrania, la defensa de los países amenazados directamente por Rusia y, en particular, Moldavia; la capacidad para apoyar a Ucrania en su frontera con Bielorrusia y en las operaciones de retirada de minas”.
“La prioridad de las prioridades es la de las municiones. Estamos decididos a llegar al final de las existencias disponibles”, indicó, al mismo tiempo que defendió la importancia de los misiles y las bombas de medio y largo alcance.
“Según nuestro análisis (...). Rusia continúa la guerra y su conquista territorial, contra Ucrania pero contra todos nosotros en general (...). Estamos convencidos de que la derrota de Rusia es esencial para la seguridad y la estabilidad en Europa”, expresó.
En esa línea anunció la creación de una coalición para enviar municiones y misiles de mayor alcance a Ucrania, insistiendo en que “la derrota de Rusia es indispensable para la seguridad y la estabilidad en Europa”.
El canciller alemán, Olaf Scholz, se mostró reacio a que su país entregue a Kiev misiles Taurus, capaces de alcanzar 500 kilómetros, para evitar una escalada en el conflicto, pero no se opuso a que otros países, como Francia o Reino Unido, sigan enviando misiles Scalp de menor alcance que ya entregan a Ucrania.
Los responsables occidentales reconocen el riesgo de que Rusia se imponga en el conflicto en 2024, cuando Ucrania se quede sin armas ni municiones. Kiev lamenta el retraso en el suministro del armamento prometido.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, se quejó en un mensaje grabado que fue reproducido durante la cumbre de que solo el 30% de los obuses prometidos por Europa han sido entregados a sus tropas, algo que reconoció Macron, que prometió buscar estas armas en aquellos países que las tengan e incrementar la producción, todo ello con un calendario claro y que se pueda cumplir para “dar visibilidad a las Fuerzas Armadas ucranianas”.
El mandatario francés apeló a “un salto adelante” en la ayuda a Ucrania sin esperar a que el Congreso de Estados Unidos descongele la ayuda solicitada por la administración Biden, ni tampoco aguardar al resultado de las elecciones en ese país de noviembre próximo.
“Actualmente Europa proporciona el 30% de la ayuda a Ucrania. Esta es una guerra europea y yo creo en la Europa de la defensa (...) No podemos legar la suerte de esta guerra, que determina nuestro futuro, en el elector estadounidense. No esperemos a ese resultado, actuemos ahora”, aseguró.