F1 | BAHRÉIN / Alonso y Sainz ya ilusionan
El asturiano arranca tercero en los libres de Bahréin y el madrileño es cuarto. Hamilton y Russell ponen delante a Mercedes. Falta Red Bull, Verstappen fue sexto.
Puede que los RB20 fueran cargados de combustible este jueves, o que estuvieran probando reglajes alternativos, pero no es un secreto que a Verstappen le gusta liderar desde los entrenamientos. Sus comentarios por radio desvelan un piloto incómodo. La climatología no acompaña, el sol calienta poco y el viento es muy incómodo para los pilotos en Sakhir. Max fue sexto a cuatro décimas de Hamilton en sus intentos más serios con el neumático blando. Pérez se quedó décimo (0.741). El coche que impresionó en el primer día de test ha sido más bien discreto desde entonces. Nadie se cree nada, pero alguna verdad habrá por alguna parte del ‘paddock’.
Más allá de los kilos de lastre, se aprecia igualdad máxima en el top-10 de la parrilla a la espera de que despegue el Red Bull. Mercedes, Ferrari, Aston Martin y McLaren pueden terminar peleando por las mismas posiciones y eso convierte a un coche de podio en carne de Q2 sin apenas diferencias. Especialmente en estas primeras carreras de la temporada, en las que los equipos tienen menos datos y conocimiento sobre sus propios coches y son los pilotos quienes marcan las escasas diferencias.
La primera jornada de entrenamientos de la temporada da un balón de oxígeno a Mercedes, los dos W15 lideran la clasificación y el arriesgado proyecto de Brackley parece funcionar, con un alerón delantero innovador y un concepto al estilo Red Bull. Dicho esto, la nueva temporada se parece mucho a la vieja: por detrás del top-10 hay una amalgama de escuderías que va de Sauber a Williams o Racing Bulls, pasando por Haas (Hulkenberg se coló séptimo, atención). Ahí, parece, este año se han colado los dos Alpine. No sería un secreto que este fin de semana el A524 se destacase en el farolillo rojo. Hasta la primera clasificación del año no se habrán despejado las incógnitas, pero ya se puede extraer alguna conclusión clara: este fin de semana serán más felices los pilotos de Aston Martin que los de Alpine. ¿Serán felices los de Ferrari?