A
pocos días del comienzo oficial de la temporada de la Fórmula 1, el
director del equipo está a la espera de la resolución del caso en su
contra por “comportamiento indebido”
El próximo fin de semana se pondrá en marcha la nueva temporada de la Fórmula 1 con el Gran Premio de Bahréin. En los test oficiales que realizó la categoría, la nueva versión del Red Bull de Max Verstappen
demostró que volverá a ser el auto a batir a lo largo del 2024. Más
allá de lo que sucederá en pista, la escudería que viene de ganar el
título de pilotos y de constructores tiene que definir qué hará con el
caso que involucra a Christian Horner.
El
equipo de la bebida energizante afronta una investigación interna en
contra del director por “conducta inapropiada” luego que se filtró, tras
un informe del medio De Telegraaf, que Horner le habría enviado
“mensajes sexuales” a una empleada durante los últimos meses del año
pasado. Frente a este escenario, y a la espera de la resolución, se
abrieron otras interrogantes que se deberán develar en un futuro
cercano.
Por
ejemplo, Ford, que le proveera los motores a RB a partir de 2026, en el
regreso de la marca a la Máxima tras estar ausente desde 2004, presiona
por definiciones. Según Associated Press, Jim Farley,
consejero delegado de la firma, le escribó una misiva a la escudería
para subrayar que la falta de avances en el caso les genera inquietud y
solicitó atención “rápida y seria”.
El
reclamo de Ford es por la “falta de resolución o indicación clara de su
parte sobre cuándo esperan una resolución justa y equitativa de este
asunto. Estamos igualmente frustrados por la falta de total
transparencia en torno a este asunto con nosotros, sus socios
corporativos”, según informó AP.
“Como hemos indicado anteriormente, sin una respuesta satisfactoria, los valores de Ford no son negociables.
Es imperativo que nuestros socios de carreras compartan y demuestren un
compromiso genuino con esos mismos valores. Mi equipo y yo estamos
disponibles en cualquier momento para discutir este asunto. Seguimos
insistiendo y esperando una resolución que todos podamos apoyar”, reza
un retazo de la carta que sacudió los cimientos de Red Bull.
No es la única sombra que se cierne sobre Horner. Su esposa, la artista Geri Halliwell, ex Spice Girl, está “mortificada y enojada”, según indicó The Sun,
aunque ella en privado, cada vez que habla con su círculo íntimo, cree
que su pareja, con quien comparte un hijo, “no hizo nada malo”.
Además, el mismo medio advirtió que Ginger Spice es el sostén de Horner en medio del escándalo. “Se está aferrando a su esposa como si le fuera la vida”, señaló una fuente del diario británico. Se vienen horas decisivas para el jefe de equipo. Motorsport deslizó que antes del viernes podría haber una resolución.