CHAMPIONS (1/8, IDA) | PORTO 1-ARSENAL 0 / Novatada del Arsenal en Porto

Wenderson Galeno, que gozó de una ocasión muy clara en el primer tiempo, marcó en la última jugada del partido para dar ventaja a los ‘dragões’ en la eliminatoria. El Arsenal no tiró a portería en todo el encuentro.

Pablo Montaño
As
Dijo el arquero portista Diogo Costa en la previa del partido que si realmente los gunners eran favoritos, “tendrán que demostrarlo”. Y no le faltó razón. Después de siete temporadas sin hacer acto de presencia en los octavos de final de la máxima competición continental, el Arsenal de Mikel Arteta pecó de ‘novato’ en su visita al Estádio do Dragão y la ida de la primera ronda eliminatoria de la Champions League 2023-2024 entre dragões y gunners se resolvió con victoria local (1-0). El conjunto londinense, que venía de marcar 21 goles en sus últimos cinco encuentros de Premier League, fue incapaz siquiera de tirar a portería en Porto, y lo pagó caro.


El siempre competitivo Porto de Sergio Conceição, con más poso y experiencia que los gunners durante las últimas temporadas en Europa, dispuso de la mejor ocasión del encuentro en las botas de Wenderson Galeno. El brasileño falló doblemente en la primera parte, pero no perdonó en la segunda. Sobre la bocina, en la última jugada del partido, un derechazo con rosca desde fuera del área puso en ventaja a los dragões de cara al partido de vuelta. Un golazo que heló la sangre de Mikel Arteta y sus pupilos. El incombustible Pepe, que se convirtió en el jugador jugador de más edad en participar en los octavos de final de la Liga de Campeones –cumplirá 41 años dentro de cinco días–, lideró a la zaga local para secar por completo a los Bukayo Saka, Gabriel Martinelli, Leandro Trossard y compañía. Aunque todavía restan 90 minutos en el Emirates Stadium, el Porto baja al Arsenal de las nubes.

Dos veces Galeno

Mikel Arteta repitió en Porto el once con el que había goleado a West Ham (0-6) y Burnley (0-5) en las últimas jornadas, pero los pupilos de Sérgio Conceição le aclararon a los gunners que la Champions League no es la Premier League. Y es que el cuadro luso, más hecho a esta fase de la competición en las últimas temporadas que el conjunto londinense, fue mejor que el Arsenal durante los primeros 45 minutos.

La intensidad del Porto afloró la versión más nerviosa de los gunners durante los primeros compases de partido. Una amarilla muy temprana de Declan Rice, las imprecisiones en el pase o los cambios de juego, y la incapacidad para mantener la posesión evidenciaron que el Arsenal no estaba cómodo, y los pupilos de Sérgio Conceição lo aprovecharon para apuntarse la primera, y doble, ocasión clara del partido. Hubo muchos aficionados locales presentes en Do Dragão que celebraron el gol de Wenderson Galeno. El brasileño estrelló contra el palo su primer disparo desde el corazón del área tras una gran internada de Francisco Conceição, y el segundo se marchó rozando el palo.

Se habían salvado los pupilos de Mikel Arteta, que no terminaron de reaccionar durante los primeros 45 minutos ante un Oporto combativo y férreo en defensa. Lo cierto es que Martin Ødegaard apareció poco, o menos de lo que a Mikel Arteta le habría gustado, y el equipo se resintió.

Ahora sí, Galeno

El arranque de segunda mitad no fue mucho mejor que el de la primera. Pero en esta ocasión, para ninguna de los dos equipos. A pesar del mayor porcentaje de posesión para el cuadro visitante, el ritmo era lento y las interrupciones por faltas se sucedían con el paso de lo minutos. Ni siquiera Bukayo Saka, principal agitador de los gunners durante los primeros 45 minutos, fue capaz de marcar diferencias desde el costado diestro. Por su parte, los locales se prodigaron por el costado diestro de su ataque, aprovechando la condición de amonestado de Jakub Kiwior. Pero tampoco estaba siendo el partido del conjunto portugués.

Salvo alguna internada de Francisco Conceição o Pepê, la producción ofensiva de los dragões cayó bajo mínimos durante los segundos 45 minutos. Sin mucho que ganar, bastante que perder y otros 90 minutos aún por disputarse, el tramo final del choque discurrió sin apenas sobresaltos y con ambos conjuntos guardando la ropa. Y es que todo apuntaba a que el encuentro terminaría sin goles, hasta que Wenderson Galeno se resarció de la clarísima ocasión fallada en la primera mitad. Un derechazo desde fuera del área, cuando tan solo restaban 30 segundos del tiempo de descuento, hizo enloquecer al feudo portista. El Porto, contra todo pronóstico, se va a Londres por delante en el global de la eliminatoria.

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