CHAMPIONS (1/8, IDA) | INTER 1-ATLÉTICO 0 / El Inter golpea primero
Un error tejido entre Reinildo y De Paul en una salida provoca el gol de Arnautovic. Thuram, Giménez y Griezmann, tocados. Morata vuelve. Ningún apercibido vio amarilla.
21:02: Se escucha un plaf. Es la bota de Griezmann contra el balón en el círculo central. El partido comienza. El Inter sale a dominar el juego con Çalhanoglu y llegadas de sus laterales. El músculo lo pone Barella. El miedo, Lautaro y Thuram. El Inter asfixia. Cuando el Atleti tiene la pelota, enseguida enciman tres futbolistas de Inzaghi como sanguijuelas. Presionan, hostigan, queman. A los tres minutos, Thuram se presenta por primera vez ante Oblak tras pase de Barella. El control se le va largo. El aire pesa plomo. El balón no corre en esa hierba llena de cepas.
21:13: Simeone se lleva las manos a la cabeza. Lino, la única cuchilla con la que de momento corta, lo intenta desde la frontal. La pelota se va fuera un palmo. Primera ocasión del Atleti. En su área se protege por alto. Lautaro remata de volea, el balón rebota en Witsel y pega en el brazo de Nahuel. “Sigan, fútbol”. Los equipos son dos púgiles que siguen observándose desde su esquina del ring. Sopesan, tantean, se estudian. El Atleti encadena tres posesiones largas. Ya respira.
21:20: “La velocidad que cuenta en el fútbol es la que está en la cabeza”. La frase con la que Witsel se define asoma para cortar, providencial con el pie, un pase de De Vrij que dejaba solo a Thuram ante Oblak. El mejor central del Cholo no es central y a los 35 años tiene cada pieza en su sitio, sobre todo en la cabeza. Rapidísimo barre. Ahora el cuero es italiano, el control, español. Se repliegan los del Cholo a medio campo, adiposos y trabados. Oblak siempre saca en largo. No hay resquicio por el que se pueda colar el talento. Tampoco el de Grizi. Al Inter le falta finura en el último pase para ponerle el lazo a las triangulaciones entre Çalhanoglu, Barella y Lautaro. Mkhitaryan estropea al final. No hay remates a puerta. El desgaste de los dos equipos para que nada pase es extenuante. Duelo a duelo. Hay que ganar todos.
21:39: A diez minutos para el descanso, Oblak atrapa un cabezazo de Lautaro. El argentino ya asoma. De Paul regala una pelota en el centro y para corregir solo mira hacia atrás. Witsel corre por él pero no llega a trabar la contra de Thuram. El disparo final de Lautaro roza en Hermoso para el saque de esquina. El Inter es una máquina perfecta de hacer fútbol. Cada pérdida rojiblanca es una lanza hacia Oblak con Thuram jugando de espaldas y Lautaro en estampida. El primero se daña el adductor en la última del Inter antes del reposo. Savic calienta, Giménez cojea. Son las 21:46 de esta noche en la que ha aún no ha pasado nada pero todo es sudor cuando los futbolistas vuelven al túnel. Descanso.
22:07: Ahora es Inzaghi quien se lleva las manos a la cabeza en un grito. El partido ha vuelto sin Giménez ni Thuram, con Savic y Arnautovic. El Inter regresa llenando todo de metralla. Apabulla. El Atleti se hunde en su campo, De Paul erra en otra salida, Lautaro caza y carga y Witsel, de nuevo, aparece para barrer al final. Dos minutos después, un espuelazo de Pavard inicia una contra italiana que acaba con un centro de Dimarco al segundo palo gritando goool. La volea de Arnautovic, solo, se va alta. El Inter ahora también muerde.
22:13: Llorente se queda tendido en el área. Ha chocado con Sommer después de que De Vrij evitara su remate tras un pase de De Paul al espacio. En ese momento, Simeone ya ha hecho otro cambio. En ese momento, al partido ya ha entrado Morata, nueve días después de su esguince de rodilla. Nada más pisar la hierba, el Atleti arma la contra. Lino corre y dispara de primeras al lateral de la red cuando Morata se la pedía, solo en el otro palo. Los púgiles ya no solo se miran, ahora se buscan el hígado. El Inter da más.
22:24: Simeone alza las manos para gritarle a Oblak que no saque, que son diez, que Witsel está fuera con dolor en una rodilla. Arnautovic acaba de volver a enviar alto, solo, otra pelota que gritaba goool tras combinar con Lautaro. El Inter parece morder menos pero sigue generando superioridades dañinas. A Koke le pesan las piernas. Simeone refresca con Reinildo y Barrios. Inzaghi, con Dumfries y Augusto, que mejorarán su equipo. Witsel sigue.
22:36: Grizi cojea, Grizi no puede. Golpe en el tobillo, en el empeine, San Siro cayendo sobre su cabeza como en aquel 2016. Correa calienta apresurado cuando Oblak saca de sus guantes un milagro ante un cabezazo de Lautaro. Un minuto después, Reinildo y De Paul no se entienden, tuya-mía-de nadie, el Inter corre y Oblak para primero ante Lautaro. El rechace le queda franco a Arnautovic que, a la tercera, vence. Simeone pide calma, que ese gol no se haga más grande, que se pueda vendar en casa. San Siro es Múnich, aquel asedio, los de Inzaghi avispas, que clavan su aguijón en cada carrera. El partido roto en lo físico y volcado hacia Oblak.